De nuestra serie #AlOídoDePetro consideramos importante retomar el tema de que el Gobierno Colombiano trámite ante el Gobierno de los Estados Unidos que se hagan públicos los archivos de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos en el caso del Magnicidio del Caudillo Liberal, Jorge Eliécer Gaitán y darles fin a 75 años de impunidad.
Y es que la Agencia de la central de Inteligencia -CIA- de Estados Unidos podría poner fin y esclarecer el asesinato de Jorge Eliecer Gaitán en 1948 que fue, sin ninguna duda, uno de los eventos más trascendentales en la historia de Colombia. No solo desató un período de violencia política y desestabilización democrática en el país, sino que también marcó el comienzo de una larga historia de impunidad y encubrimiento por parte de las autoridades.
Setenta y cinco años después de la muerte de Gaitán, la falta de respuestas sobre su asesinato continúa siendo una herida abierta para la sociedad colombiana. Las investigaciones oficiales han sido escasas e ineficaces y las teorías sobre quién fue el responsable del asesinato han sido numerosas y variadas. Muchos creen, incluso la familia del caudillo, que el crimen fue orquestado por las élites políticas y económicas del país, mientras que otros sugieren la participación de grupos extranjeros o incluso de la CIA estadounidense.
La única certeza es que la muerte de Gaitán desencadenó una serie de eventos que cambiaron la historia de Colombia para siempre. El país entró en una época de violencia y conflicto armado que permanece hasta nuestros días, con grupos guerrilleros, paramilitares y narcotraficantes luchando por el control del país.
Lo cierto de todo esto es que las diferentes agencias de inteligencia norteamericanas podrían acabar con 75 años de impunidad en un crimen que repercute hasta nuestros días.
Para nadie es un secreto que versiones oficiales han logrado determinar el seguimiento y monitoreo constante a cualquier actuación del político liberal, visto como un nuevo foco socialista por el gobierno norteamericano en tiempos de guerra fría.
Estos documentos son fundamentales para refutar versiones que se han montado para desviar la investigación y dar con los verdaderos responsables del asesinato político más relevante para nuestra sociedad.
Por eso, las pregunta históricas y necesarias son ¿por qué, 75 años después, los documentos que esclarecerían lo sucedido aún se conservan en los archivos secretos de Estados Unidos? ¿A quién podría estar protegiendo ocultando los archivos? ¿Qué ganaríamos cómo país si se supiera la verdad de lo sucedido?
El Gobierno norteamericano se ha visto inmerso en Golpes de Estados, campañas contra diferentes gobiernos en América Latina y el mundo.
Un hecho con grandes señales de conspiración, que no han sido esclarecidas hasta el momento y muy similares al asesinato de Gaitán, fue el homicidio de John F. Kennedy, ocurrido en Dallas el 22 de noviembre de 1963. Varias investigaciones oficiales concluyeron que Lee Harvey Oswald, empleado de un almacén, fue el supuesto asesino. Luego de cometer el crimen le dispararon hasta matarlo.
Para Chile fue significativo abrir la información de la CIA al dominio público para que se conociera la verdad de lo sucedido durante el Golpe de Estado y que como país se hiciera una profunda reflexión de lo acontecido, eso sí, no olvidando la necesidad de acabar con la impunidad en caso contra el Gobierno Democrático de Allende del 73.
La sociedad colombiana, los millones de víctimas y nuestro momento histórico esperan lo mismo tras más de 75 años de incisiva violencia consecuencia del magnicidio del Caudillo.
El Gobierno de Estados Unidos tiene una responsabilidad con la verdad de Colombia, no solo por el caso Gaitán, sino también por otros hechos en los que podrían tener una responsabilidad directa sobre diferentes momentos de la violencia colombiana, por ello, se hace menester y urgente que se abran todos los archivos que contienen una versión recopilada por agentes de la CIA que podría ser determinante para conocer la verdad de lo que pasó y que ello nos lleve a los colombianos a buscar un rumbo diferente para el futuro.
Colombia tiene derecho a conocer esa verdad sea cual sea, si fue la CIA, las Petroleras, la oligarquía anquilosada en el poder o si fue Roa un asesino el único responsable.
El Gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego, en nombre de los millones de víctimas y de nuestra frágil democracia debe solicitar al Gobierno Norteamericano la desclasificación inmediata de los archivos de inteligencia porque, no mataron a un hombre, mataron a todo un pueblo.
A.U.
