Con la renuncia de Álvaro Uribe a su curul como senador, desaparece la competencia de la Sala Especial de Instrucción para procesarlo por soborno en la actuación penal y fraude procesal, ya que son delitos comunes que no tienen relación con la función de congresista.
Esa es la tesis que la Procuraduría acaba de enviarle a la Sala de Instrucción de la Corte Suprema en un concepto de 21 páginas en el que pide que el caso contra el hoy exsenador y expresidente de la República sea enviado a la Fiscalía. Uribe es investigado por supuesta manipulación de testigos.
El Ministerio Público señaló que, con la separación definitiva de Uribe de su curul, desaparece el fuero que la Constitución le otorgaba, por lo que la Corte solo podrá conocer de los procesos en los que los presuntos delitos tuvieran relación directa con su función de senador.
En su análisis, la Procuraduría estableció que la Sala de Instrucción no relacionó actuaciones presuntamente desplegadas por Uribe dirigidas a consolidar un abuso de poder para controlar su liderazgo político, que pudiera tener incidencia en el caudal electoral o que diera paso a un acercamiento a las regiones de manera delictiva para consolidar su dominio y el posicionamiento en el cargo.
Tampoco se demostró, dice el Ministerio Público, que hubiera utilizado servidores de su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) o que pusiera en peligro latente su actividad en el Congreso de la República. “No hay prueba de que el doctor Uribe Vélez –con ocasión de los presuntos punibles en los que incurrió– hubiere comportado un ejercicio abusivo de sus funciones o eficaz para acceder a la posición de poder”, dijo la Procuraduría.
Añadió que “si no existe prueba siquiera sumaria de que el sindicado hubiere utilizado sus facultades como senador para supuestamente cometer tales delitos, mucho menos obra alguna encaminada a demostrar que en la presunta comisión de los mismos se excedió o abusó de sus labores congresuales”.
Por otro lado, dijo que “se observa que los hechos ocurrieron en época ajena a campañas políticas o contiendas electorales –en tanto ya era congresista para ese momento–, sin que pueda entonces evidenciarse relación entre estos y los objetivos de lograr una curul en el Senado de la República”.
Por todo esto, a juicio del Ministerio Público, “la simple coincidencia temporal de la presunta comisión de los hechos y la condición de ostentar el cargo de senador no puede considerarse como suficiente para extender el fuero y por ende la competencia de la Sala Especial de Instrucción, luego de la renuncia al cargo”.
El concepto de la Procuraduría no es vinculante, lo que quiere decir que aunque la Corte debe analizarlo, no está obligada a decidir de acuerdo a lo que dice.
La Sala de Instrucción se reúne este jueves y podría abordar el tema de la competencia sobre el caso contra Uribe. Por este caso, el expresidente está privado de su libertad desde la primera semana de este mes en su finca El Ubérrimo.
La defensa del expresidente y exsenador ha insistido en su inocencia y ha denunciado que es víctima de testigos mentirosos. Igualmente ha señalado que la Corte ya perdió la competencia sobre los procesos en su contra, incluyendo la investigación por la masacre de El Aro, por la cual fue citado a versión libre.
Tomado de El Tiempo
