Bruselas, 12 de febrero de 2025.- El Reino Unido anunció un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania valorado en 150 millones de libras (179,7 millones de euros) consistente en drones, tanques y sistemas de defensa antiaérea.
El secretario británico de Defensa, John Healey, comunicó esta nueva ayuda de Londres al inicio de la vigésimo segunda reunión del grupo de una cincuentena de países que apoya a Ucrania frente a la invasión de Rusia, y que hoy presidió por primera vez el Reino Unido y no Estados Unidos.
Según detalló el ministerio de Defensa británico en un comunicado, esta nueva ayuda servirá para “apoyar a las tropas ucranianas que luchan contra Rusia en primera línea”, como parte del compromiso anual con Ucrania de 3.000 millones de libras (3.595,2 millones de euros).
La ayuda del Reino Unido a Ucrania ha alcanzado este año su nivel más alto con un total de 4.500 millones de libras (5.392,8 millones de euros), aseguró.
Alertó de que, “aunque Rusia está debilitada, sigue siendo innegablemente peligrosa y poco a poco va ganando terreno”.
“Nuestro trabajo como ministros de Defensa es poner en manos de los combatientes ucranianos lo que necesitan para luchar y para ayudar a obligar a (el presidente ruso, Vladímir) Putin a sentarse a la mesa de negociaciones”, apuntó.
Según cifras comunicadas hoy por el secretario general de la OTAN. Mark Rutte, en una rueda de prensa previa a la reunión de ministros de Defensa de la Alianza de mañana, los aliados han sobrepasado su compromiso de dedicar 40.000 millones de euros a la defensa ucrania este año, y han llegado a los 50.000 millones.
Healey también dejó claro que “la seguridad de Ucrania es importante para la seguridad mundial” y que “esta guerra nunca fue sólo sobre el destino de una nación”, ya que “China está observando, Irán y Corea del Norte están observando”.
Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, que participaba por primera vez en una reunión de este grupo internacional integrado en gran medida por socios de la OTAN, dejó claro que los europeos se deben implicar más en la seguridad de Ucrania.
No vio “realista” que el país pueda volver a sus fronteras internacionalmente reconocidas de 2014, cuando Rusia comenzó a tomar sus territorios, ni que el país logre el ingreso a la OTAN como parte de sus garantías de seguridad una vez haya un acuerdo de paz.
A su llegada a la reunión, el ministro neerlandés de Defensa, Ruben Brekelmans, consideró que se debe asegurar que se sigue apoyando a Ucrania porque, «al final, el único camino a la paz es mediante la fortaleza”, y agregó que, si se muestra «debilidad», la guerra en Ucrania «seguirá».
Por su parte, el ministro estonio de Defensa, Hanno Pevkur, declaró que el enviado especial estadounidense para Ucrania y Rusia, Keith Kellogg, no será el encargado de decidir sobre el plan de paz para Ucrania.
«Él probablemente dará sus opciones y el resultado final todavía tiene que venir del presidente (ucraniano, Volodímir) Zelenski, y de otros líderes. A Kellogg le corresponden las opciones, las negociaciones, explorar los límites», expuso, y descartó que en la OTAN o en la conferencia de seguridad de Múnich esta semana se presente de manera concreta el plan estadounidense de paz.
El titular letón de Defensa, Andris Spruds, reconoció en todo caso que el apoyo de Estados Unidos a Ucrania es «indispensable» y «crucial».
Preguntado por lo que espera del nuevo Gobierno estadounidense con respecto a la OTAN, afirmó que los aliados deben estar «unidos» y dijo creer que hay una comprensión sobre la «amenaza común» para la organización transatlántica.
Sobre el Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, declaró que es una plataforma «instrumental» y «muy imprescindible para seguir apoyando a Ucrania».
El titular finlandés, Antti Häkkänen, dijo ser «bastante optimista» con respecto a que Washington siga apoyando a Ucrania, pero admitió que los países europeos tienen que hacer «mucho más» en lo referente al respaldo a Kiev.
EFE