Praga, 1 febrero.- La República Checa anunció que va a endurecer, desde este viernes 5 de febrero, las condiciones de entrada a quien llegue desde España, al pasar este último país al grupo de «altísimo riesgo», informó hoy el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
Praga acordó esta medida para evitar el colapso de su sistema sanitario y protegerse de las «nuevas mutaciones de la covid», señala el comunicado.
En el país hay actualmente 5.301 personas hospitalizadas con el SARS-CoV-2, de las cuales 941 se encuentran en estado grave, mientras que la tasa de contagio en las dos últimas semanas asciende a 982 por 100.000 habitantes, sólo por detrás de Portugal y España.
El Ministerio de Sanidad checo ha creado una nueva categoría de países de «altísimo riesgo de contagio» (en el mapa de color aparecen como zonas verde oscuro), y, además de España, ahí se encuentran Eslovaquia, Portugal, Irlanda y todos los demás países extracomunitarios.
Los que vienen de esos países están sujetos a la obligación de hacerse, antes de entrar, un test PCR negativo (no es válido el test rápido de antígenos), para quedar después cinco días en cuarentena y someterse a un nuevo test para confirmar el resultado del inicial y poder salir del confinamiento.
También obliga a usar una mascarilla FFP2 durante diez días desde la llegada.
De estas nuevas reglas están eximidos los que hacen escala en el país y sólo estén durante un máximo de 12 horas.
La República Checa ya prohibió desde la madrugada del sábado la entrada de extranjeros en «viajes no esenciales», con lo que quedan prohibidos los viajes turísticos.