Al menos 15 personas, entre ellas tres policías militarizados, fueron detenidas este martes en una operación contra una milicia que había impuesto su propio régimen en un barrio de Río de Janeiro, informaron fuentes oficiales.
Los agentes aún buscan a otros nueve sospechosos acusados de integrar este grupo criminal acusado de homicidio, extorsión y venta ilegal de servicios y bienes en la región de Jacarepaguá, zona oeste de la capital fluminense.
Entre los investigados hay un cuarto policía militarizado acusado de corrupción y declarado prófugo de la Justicia, de acuerdo con la Policía Civil.
La operación también incluyó el registro de 35 direcciones vinculadas a la organización delictiva.
Según la Fiscalía, la milicia había constituido un régimen paralelo en la comunidad y monopolizaba, a través de la violencia y la extorsión, la prestación de servicios, como el transporte de pasajeros, la venta de bombonas de gas y el suministro de la señal de televisión e internet.
También cobraban una «tasa de seguridad» a los vecinos y comerciantes, practicaban la usura y construían inmuebles irregulares en áreas de protección ambiental, según el Ministerio Público de Río de Janeiro.
La investigación se inició a partir del análisis pericial del teléfono de Sergio Luiz de Oliveira «Serginho», asesinado en marzo de 2019 y quien era señalado como el jefe de la milicia que controla la zona.
A partir de esas pesquisas, las autoridades brasileñas descubrieron que los actuales líderes del clan son los hermanos de «Serginho»: Sidney William y Silvanio.
También supieron que una parte de las ganancias que obtenían a partir de las actividades ilícitas era transferida a la cúpula de la milicia que domina toda esa región de Río de Janeiro.
Las milicias son organizaciones criminales integradas por expolicías o agentes en activo corruptos que disputan con bandas de narcotraficantes el control de diversas áreas en Río de Janeiro y tienen poder de influencia en la política fluminense.
Las autoridades sostienen que integrantes de estos grupos están detrás del asesinato a tiros de la concejala Marielle Franco, ocurrido en marzo de 2018, y del conductor del vehículo en el que se trasladaba la edil tras participar en un acto político.
Hasta el momento, dos expolicías, Ronnie Lessa y Élcio Vieira de Queiroz, se encuentran en la cárcel acusados de ser los autores materiales del brutal crimen y que causó una gran conmoción mundial.
Sin embargo, aún se desconoce quién fue el autor intelectual, pues se sospecha que el asesinato de Marielle fue encargado.
EFE