Moscú/Leópolis, 18 de julio de 2022.- Las fuerzas rusas continúan los intentos de tomar el nudo ferroviario de Síversk, esencial para el futuro avance de la ofensiva en la región oriental ucraniana de Donetsk, a la vez que tratan de fortalecer su presencia en los territorios que controlan en el este y el sur del país.
«Síversk está totalmente bajo nuestro control operativo. Se combate en la ciudad y en sus alrededores», declaró este lunes el asesor del ministro de Interior de la autoproclamada República Popular de Lugansk, Vitali Kiseliov, citado por la agencia rusa TASS.
Kiseliov matizó así una declaración ofrecida horas atrás en la que hablaba del «control» de las milicias prorrusas sobre la estratégica ciudad.
El representante separatista reconoció asimismo que la artillería ucraniana sigue castigando intensamente a las tropas rusas que asedian Síversk.
El estadounidense Instituto de Estudios de la Guerra (ISW) constató que «las tropas rusas priorizan los avances alrededor de Síversk y Bajmut mientras mantienen posiciones defensivas al norte de la ciudad de Járkov y a lo largo del eje sur», en referencia a las regiones de Jersón y Zaporiyia, controladas casi por completo por Rusia.
RUSIA SE ENFOCA EN LAS ARMAS DE OCCIDENTE
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, aprovechó una visita de inspección a la agrupación «Este» que combate en Ucrania para ordenar el ataque prioritario contra los sistemas de misiles y artillería ucranianos suministrados por Occidente.
Según el Gobierno de Kiev, con el empleo de las lanzaderas de misiles estadounidense HIMARS y MS270 y de obuses M777, el Ejército ucraniano ha conseguido destruir numerosos arsenales en la retaguardia rusa, con el consiguiente impacto en la logística de su contingente militar.
El Ministerio de Defensa, que no precisó cuándo Shoigú efectuó la visita, estimó que Ucrania emplea ese armamento para «atacar barrios residenciales de localidades del Donbás e incendiar trigales y silos con cereales».
Este sábado Defensa, también sin precisar la fecha, informó de una visita de inspección de Shoigú a las agrupaciones «Centro» y «Sur», que participan en la «operación militar especial» en Ucrania y a las que dio la instrucción de incrementar las acciones bélicas.
Sin embargo, según el ISW, «es poco probable que el final de la pausa operativa rusa cree una nueva ola masiva de ataques terrestres en múltiples ejes de avance a pesar de la orden pública del ministro de Defensa ruso».
PRESIÓN EN DONETSK
Mientras, los principales esfuerzos rusos se hacen notar en la región de Donetsk, donde, según el mando ucraniano, «las unidades enemigas dispararon contra la infraestructura civil y militar» en Síversk, Verjnokamianske, Hryhorivka, Ivano-Daryivka, Spirne y otros asentamientos.
«El enemigo está tratando de llevar a cabo una ofensiva cerca de Hryhorivka, los combates continúan. Nuestros defensores rechazaron los ataques en las localidades de Verjnokamianske, Spirne y Serebryanka», indicó el parte castrense.
El Ejército ruso bombardeó con morteros, artillería y misiles las posiciones ucranianas en Avdiivka, Kurajiv, Novopavlivsk y Zaporiyia, añadió el mando ucraniano.
En la ciudad ucraniana de Toretsk, ubicada al norte de Avdiivka, la artillería rusa destruyó en horas de la mañana un edificio de dos plantas y mató a seis personas, según informó en su canal de Telegram el Servicio de Emergencias ucraniano.
PREPARATIVOS PARA LA GRAN BATALLA
El portavoz de las milicias de Donetsk, Eduard Basurin, anunció hoy que las tropas de la autoproclamada república cortaron la carretera entre Kostiantynivka y Avdiivka y cercaron parcialmente a esta última.
Basurin señaló que en estos momentos se preparan las condiciones para el comienzo de la toma definitiva de los restantes territorios de la región de Donetsk que aún no están bajo control ruso.
Avdiivka es uno de los bastiones en la región de Donetsk, tras Sloviansk y Kramatorsk, por lo que se ha convertido en un objetivo prioritario de las milicias prorrusas, que acusan al Ejército ucraniano de utilizar esta localidad para bombardear la vecina ciudad de Donetsk, bajo control ruso.
COMBATES POSICIONALES EN CHERNIHIV, JÁRKOV Y JERSÓN
Mientras, las tropas rusas se han limitado a contener las contraofensivas ucranianas tanto en Chernihiv (norte) como en Járkov (este) y Jersón (sur), según el mando ucraniano, que informó de reconocimientos aéreos y ataques de artillería en las regiones ucranianas de Chernihiv y Sumy.
«En la dirección de Járkov, el enemigo está tratando de evitar que nuestras tropas avancen hacia la frontera estatal», añadió el parte, al señalar que las tropas rusas atacaron con su artillería tanto la ciudad como varias localidades cercanas.
En el sur, ambos bandos sostuvieron duelos de artillería «a lo largo de la línea de contacto», según Ucrania, que denunció un ataque aéreo contra la localidad de Potemkino y el uso de drones para el reconocimiento aéreo de los movimientos de sus fuerzas.
TERREMOTO POLÍTICO
Todo ello en medio de la mayor reorganización del Gobierno ucraniano desde el inicio de la campaña militar rusa, después de que el presidente, Volodímir Zelenski, destituyera la víspera a su fiscal general, Irina Venediktova, y al jefe de los Servicios de Seguridad (SBU), Iván Bakanov, amigo íntimo del mandatario.
Zelenski firmó este lunes los decretos con la designación de Vasil Malyuk como fiscal general en funciones y de Oleksiy Symonenko como jefe del SBU en funciones, publicados en el sitio web de la Presidencia ucraniana.
Al anunciar la destitución de ambos funcionarios, el mandatario ucraniano aseguró que más de 60 empleados de las entidades que dirigían los cesados permanecieron en los territorios ocupados y «trabajan contra nuestro Estado».
Zelenski denunció además que se habían detectado vínculos entre las fuerzas de seguridad ucranianas y los servicios especiales de Rusia, lo cual «constituía un crimen contra los cimientos de la seguridad nacional».
EFE