Moscú/Kiev, 1 de marzo de 2022.- Rusia exigió hoy a Estados Unidos la retirada de suelo europeo de sus armas nucleares y reclamó de nuevo garantías de seguridad a la OTAN, cuyo secretario general, Jens Stoltenberg, reiteró que la Alianza no enviará tropas a Ucrania, pero sí dará todo el apoyo militar necesario.
Por videoconferencia desde Moscú, ya que las sanciones le impiden volar a Ginebra, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, intervino en la Conferencia de Desarme de la ONU, mientras sus ejércitos prosiguen la ofensiva en Ucrania, en la sexta jornada desde la invasión ordenada por Vladímir Putin.
«Para nosotros es inaceptable que, contrariamente a las disposiciones fundamentales del Tratado de No Proliferación de las armas nucleares, las armas nucleares de los Estados Unidos sigan estando ubicadas en el territorio de varios países europeos», dijo.
El jefe de la diplomacia rusa también criticó a la Unión Europea , de la que dijo que «no respeta el derecho fundamental al movimiento, con sanciones ilegitimas y unilaterales».
En este misma línea, criticó la decisión de varios países occidentales de suministrar armas a Ucrania y acusó al gobierno de Volodímir Zelensky de haber entrado en «juegos peligrosos y en planes de adquirir sus propias armas nucleares» con tecnologías que supuestamente quedan del periodo en que este país formaba parte de la Unión Soviética.
Zelenski, por su lado, llamó este martes al mundo a cerrar el cielo a «misiles, aviones y helicópteros rusos» por su invasión de Ucrania, según dijo en un mensaje de vídeo difundido por su gabinete.
«(A Rusia) hay que cerrarle el acceso a todos los puertos, aeropuertos y canales del mundo. Ese país no debe recibir centenares de miles de millones por exportaciones de recursos energéticos», agregó.
Con posterioridad, el presidente ucraniano intervino por vídeoconferencia ante el Parlamento Europeo, a cuyos integrantes dijo: «Sin ustedes, Ucrania estará sola. Hemos demostrado nuestra fuerza, hemos demostrado que somos iguales que ustedes. Demuestren que están con nosotros, que no nos dejarán de lado».
La respuesta la dio la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien admitió que las sanciones económicas a Rusia por invadir Ucrania tendrán también un precio para la Unión Europea que el bloque comunitario está dispuesto a asumir a cambio de proteger la libertad.
LA OTAN NO ENVIARÁ FUERZAS
«La OTAN no va a ser parte del conflicto. La OTAN no va a enviar tropas a Ucrania o mover aviones a espacio aéreo ucraniano», dijo su jefe, Jens Stoltenberg, durante una rueda de prensa en la base aérea militar polaca de Lask.
El político noruego indicó que los aliados están prestando todo tipo de apoyo militar con el envío de material, de armas antitanque, de sistemas de defensa antiaérea y todo clase de equipamiento militar para Ucrania, además de ayuda humanitaria y económica.
«La OTAN es solidaria con Ucrania», aseguró, antes de hacer hincapié en que los países aliados han impuesto «sanciones severas» contra Rusia por la invasión «totalmente injustificada», «brutal» e «inaceptable» de Ucrania, de la que considera responsable tanto a Moscú como a Bielorrusia por hacerla posible.
LA UE TAMBIÉN REPLICA
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, y los miembros de su gobierno serán hechos responsables y deberán rendir cuentas por sus acciones bélicas en Ucrania, que intentan justificar «disfrazando los hechos», dijo hoy el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
En su intervención en el mismo Consejo de la ONU de Ginebra, Borrell aseguró que los intentos que está haciendo Rusia en los foros internacionales para justificar sus acciones no funcionarán.
«Los hechos son los hechos. Las acciones del presidente Putin y su gobierno son opuestas a los principios en los que se basa la ONU y el Consejo de Derechos Humanos. Ellos deben responder, y responderán», recalcó el responsable europeo. Rusia se burla del multilateralismo, dijo el jefe de la diplomacia comunitaria.
LA GUERRA SIGUE
Mientras tanto, Rusia continuará la «operación militar especial» en Ucrania hasta que «alcance sus objetivos», afirmó este martes el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú.
«Lo importante para nosotros es proteger a la Federación de Rusia de la amenaza militar creada por Occidente, que intenta utilizar al pueblo ucraniano en la lucha contra nuestro país», dijo Shoigú, citado por la agencia Interfax.
Shoigú agregó que Rusia continuará la intervención en Ucrania hasta conseguir los objetivos fijados, que consisten en «la protección de la población del Donbás, así como la demilitarización y la desnazificación de Ucrania».
Por su parte, los separatistas prorrusos en el Donbás aseguraron hoy haber tomado el control de 29 localidades dominadas hasta ahora por el Ejército ucraniano, y denunciaron ataques con artillería de las fuerzas de Kiev contra la ciudad de Górlovka, en la región de Donetsk, donde habrían resultado heridos 16 civiles.
AUMENTAN LOS MUERTOS Y LOS REFUGIADOS
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU tiene registrados 102 muertos y 304 heridos civiles desde que empezó la guerra, una cifra mucho menor que la difundida por las autoridades ucranianas, que es de 352 hasta el momento.
En cuando a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), elevó hoy a 660.000 las personas que han abandonado Ucrania hacia los países vecinos en los cinco primeros días de guerra.
Los refugiados están sufriendo largas esperas para entrar en algunos países –hasta 60 horas–, según señaló la portavoz del ACNUR Shabia Mantoo.
Polonia, Rumanía, Hungría, Eslovaquia y Moldavia, todos ellos vecinos de Ucrania, son por ahora los principales destinos de este flujo de refugiados.
EFE