Madrid, 27 de diciembre de 2023.- El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, subrayó este miércoles que está “abierto y dispuesto” a formar parte de una operación militar de la OTAN y la Unión Europea en el mar Rojo si se plantea como una “específica”, pero no en el marco de la operación Atalanta contra la piratería.
En una rueda de prensa, explicó que “España no se opone a que se cree otra operación en el mar Rojo” a raíz de los ataques de los rebeldes hutíes del Yemen contra barcos comerciales, en el contexto de la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza.
Pero consideró que la que ya está en marcha contra la piratería en el Índico, Atalanta, “no tiene las características ni es la naturaleza de la operación que se necesita” en el mar Rojo.
“La situación es completamente distinta, el riesgo diferente y el desafío es distinto; no tienen nada que ver una con otra”, subrayó el jefe del Ejecutivo español.
Como muestra de su compromiso con las misiones de paz de la OTAN y la UE, Sánchez recordó que España es el país comunitario que participa en más misiones en el extranjero y que, de hecho, cuenta con más de 3.000 soldados desplegados por todo el mundo.
Para Sánchez, el compromiso de España con la OTAN y la UE “es total y absoluto”, por lo que se sumará a una operación especial para defender el transporte marítimo comercial en el mar Rojo, pero no bajo el “paraguas” de Atalanta.
“Si se quiere lanzar esa operación, bien estará”, zanjó.
Los ataques a buques comerciales en el mar Rojo que han llevado a cabo los hutíes desde Yemen han hecho que algunas de las principales navieras del mundo suspendan sus operaciones en la zona, lo que pone en jaque la cadena de suministros global y amenaza con impactar a países importadores de petróleo y gas como España.
Los ataques con drones y misiles han obligado a las compañías a buscar rutas alternativas, principalmente a través del cabo de Buena Esperanza, en el sur de África, un trayecto que puede añadir diez días de viaje hacia Europa desde el golfo Pérsico y aún más desde puertos asiáticos más alejados.
EFE