Según informa Ansa Latina, al menos 10 personas murieron en medio de un ataque suicida en una mesa electoral en Kabul, capital de Afganistán, en medio de unas elecciones parlamentarias cargadas de tensión por las fuertes amenazas de los talibanes. En el ataque, al menos otras 40 personas resultaron heridas, varias de ellas de gravedad, e igualmente se presentaron más ataques en otras regiones del país.
El ministerio del interior de Afganistán se vio obligado a realizar el despliegue de otras 20 mil unidades para la protección de los parlamentarios, que ya contaban con 70.000 soldados para la protección de las elecciones.
En la provincia de Kunar, los talibanes realizaron disparos de artillería en las carreteras que conducían a los centros de votación y dos mujeres resultaron heridas, mientras una pequeña bomba explotó en Qarabagh, a pocos metros de una larga fila de votantes, pero no dejó víctimas.
El caos reina en varias zonas del país, incluso muchos centros de votación no han abierto sus puertas, por lo que las autoridades decidieron alargar la hora del cierre de las votaciones.
A poco de tiempo de cumplirse 17 años desde la intervención estadounidense que acabó con el régimen talibán, los extremistas tratan de acabar con la frágil democracia que se vive en el país y erigirse como la única alternativa para acabar con la guerra.