Se agudiza la crisis humanitaria en Tumaco

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Por «Florentino Ariza»

El martes 17 de octubre otro líder social fue asesinado en Tumaco, vereda El Restrepo. La víctima fue José Yair Cortés, vocal de la Junta del Consejo Comunitario del Alto Mira y Frontera, donde hace tres semanas fueron asesinados seis campesinos y heridos otros veintidós, a manos de la Policía Antinarcóticos que cubría una protesta social en la zona por la erradicación forzosa de cultivos de uso ilícito.

Con Cortés ya serían 145 los homicidios ocurridos en Tumaco en lo que va corrido del año. El líder campesino, que ya habría recibido amenazas en su contra, portaba en el momento de los hechos un chaleco antibalas y un celular como elementos de seguridad brindados por la Unidad Nacional de Protección (UNP), entidad que estaba a cargo de José Yair Cortés, luego de que toda la Junta del Consejo Comunitario del Alto Mira y Frontera recibieran intimidaciones a finales de agosto.

El motivo del asesinato, se presume, estaría relacionado con el apoyo del Consejo Comunitario a la sustitución de cultivos en el puerto nariñense, de acuerdo con el Programa de Sustitución acordado en La Habana, entre el Gobierno nacional y las FARC. En reiteradas ocasiones, la Junta de Gobierno de dicha organización comunitaria ha denunciado la grave crisis humanitaria y de seguridad social en la que se encuentra este municipio que concentra la mayor cantidad de cultivos de uso ilícito sembrados en todo el país.

Según el último informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC[1]), en 2016 se encontraron sembradas 146.000 hectáreas de cultivos ilícitos en Tumaco, lo que ha desatado confrontaciones armadas entre grupos ilegales, comunidades y Fuerza Pública, desencadenando hechos lamentables como los ocurridos el 5 de octubre.

De acuerdo con el Consejo Comunitario del Alto Mira y Frontera, las organizaciones delincuenciales que operan en estos territorios asociadas al paramilitarismo y las disidencias de las FARC, estarían presionando a la sociedad civil para que se movilice en contra de la sustitución de cultivos. Ante la negativa por parte de las comunidades, los principales líderes campesinos de la zona rural de Tumaco fueron amenazados de muerte y obligados a desplazarse al casco urbano para recibir protección por parte de la UNP. Información revelada por Verdad Abierta, advierte que los líderes están reunidos en una casa del puerto y presentan cuadros de estrés e hipertensión.

Por su parte, la Fundación Paz y Reconciliación atribuye las causas de la crisis humanitaria en Tumaco a una estrategia inadecuada del Gobierno nacional en la erradicación de los cultivos de uso ilícito:

«Las fuertes deficiencias del enfoque de la lucha contra las drogas emprendida por el estado colombiano bajo directrices internacionales. Es esta política la que arrinconó a policías y campesinos a enfrentarse entre sí y la que no ha permitido fortalecer las relaciones entre fuerza pública y comunidades», señala un informe presentado la semana pasada por esta fundación.

Tumaco es un territorio estratégico por ser zona fronteriza y tener un puerto en el océano Pacífico. El mismo informe detalla que allí se encuentra toda la cadena del narcotráfico por las ventajas que presenta la región.

«En Tumaco no solo se concentran los cultivos de hoja de coca, también allí las cocinas o laboratorios de clorhidrato de cocaína se cuentan por centenares, además al ser zona de frontera se convierte en municipio de salida de droga. Es decir, en un pequeño territorio se concentra gran parte de la cadena criminal del narcotráfico. Por eso este territorio es tan apetecido. En otros territorios del país se puede decir que en unas zonas quedan los cultivos, a decenas de kilómetros están las cocinas y la frontera se encuentra a centenares de kilómetros», asegura el documento de Paz y Reconciliación.

La semana pasada, la Defensoría del Pueblo emitió un informe sobre los hechos acontecidos en Tumaco. En este documento solicitaron medidas de protección para los miembros del Consejo Comunitario del Alto Mira y Frontera. No obstante, pareciera que las medidas no fueron activadas. El crimen de José Yair Cortés pudo ser evitado, pues las autoridades ya tenían conocimiento de las amenazas que se habían presentado en los últimos meses en su contra.

Tumaco, que fue pensado en La Habana como la prueba piloto del posconflicto, evidencia que el gobierno de Juan Manuel Santos no está cumpliendo con lo pactado. La falta de recursos para la sustitución y el énfasis en su estrategia de erradicación no permiten solucionar el problema de las plantaciones ilícitas en Tumaco, por el contrario, tienen enfrentadas a las comunidades con la Fuerza Pública y a los grupos ilegales que sustentan su negocio en la droga.

El asesinato de líderes sociales y las constantes amenazas a los excombatientes de las FARC dan muestra de la falta de garantías para la no repetición. Si no se interviene con urgencia este puerto nariñense, la situación que allí se vive se puede replicar en otros municipios. Esto sí que pondría en riesgo la paz de los colombianos.

Fuentes:

https://www.elespectador.com/noticias/nacional/asesinan-otro-lider-social-en-tumaco-narino-articulo-718593

https://www.elespectador.com/noticias/paz/los-10-municipios-en-los-que-se-podria-repetir-la-crisis-de-tumaco-articulo-718694.

http://www.rcnradio.com/nacional/lider-social-asesinado-tumaco-contaba-chaleco-antibalas-celular

http://www.semana.com/nacion/articulo/defensoria-del-pueblo-habia-pedido-medidas-urgentes-para-tumaco/544141

http://www.semana.com/nacion/articulo/asesinan-a-uno-de-los-lideres-comunitarios-que-denuncio-masacre-de-tumaco/544116

http://www.verdadabierta.com/procesos-de-paz/farc/6784-el-de-jose-jair-cortes-otro-asesinato-anunciado-en-tumaco

[1] Por sus siglas en inglés.