Colonia (Alemania), 22 abr – Los nuevos cinco astronautas profesionales que fueron seleccionados en 2022, el español Pablo Álvarez, la francesa Sophie Adenot, la británica Rosemary Coogan, el belga Raphaël Liégeois y el suizo Marco Alain Sieber, se graduaron este lunes en el Centro Europeo de Astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA) tras un año de entrenamiento al máximo nivel.
«Es un día muy importante. Un momento muy histórico para vosotros los astronautas y para la ESA», dijo en la ceremonia en Colonia (Alemania) el director general de la ESA, Josef Aschbacher, quien recalcó que ahora la organización europea cuenta con once astronautas de ocho Estados miembros, entre ellos España.
También indicó que cinco de los astronautas tendrán la primera oportunidad de volar al espacio como pronto a principios de 2026, según el plan de vuelos negociados con la NASA y otros socios de la Estación Espacial Internacional (EEI), para lo cual los elegidos tendrán que someterse a otro entrenamiento para «estar listos realmente» para volar a plataforma orbital.
Aschbacher explicó que más de 300 personas se implicaron en la formación de los nuevos astronautas, que fueron sometidos a un entrenamiento compuesto por teoría y muchas prácticas.
El ingeniero aeronáutico español Pablo Álvarez se convierte en el tercer astronauta español en poder viajar en una misión al espacio después del hispano-estadounidense Miguel López-Alegría y Pedro Duque.
Álvarez en una ronda de preguntas y respuestas tras la ceremonia de graduación afirmó: «Ahora estamos centrados en preparar una misión a la EEI, que es un desafío bastante grande».
«Como astronauta de la ESA que representa a España, es un honor unirme a pioneros como Pedro Duque», añadió Álvarez con motivo de la graduación de la promoción 2022, a la que asistió la ministra española de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, y a la que enseñó momentos antes de la ceremonia las instalaciones de la Agencia Espacial Europea en Colonia.
La astronauta Sophie Adenot soñó dese pequeña con ser astronauta y completar esta formación básica, a su juicio, «es sólo un paso en este apasionante camino» que les prepara «para los rigores de la exploración espacial».
Por su parte, Rosemary Coogan señaló: «Juntos, estamos listos para afrontar los desafíos y aprovechar las oportunidades que nos esperan, unidos por nuestra pasión común por el espacio».
«La formación básica de astronauta fue una experiencia intensa que destacó la importancia del trabajo en equipo y el aprendizaje permanente», dijo Raphaël Liégeois, quien confió en «contribuir al descubrimiento y al progreso científico».
Marco Alain Sieber abundó en las ideas de sus compañeros y aseguró: «Estoy listo para participar en el esfuerzo colectivo para explorar nuestro universo en beneficio de la vida en la Tierra y las generaciones futuras».
También concluyó un año de entrenamiento básico como astronauta la candidata australiana Katherine Bennell-Pegg, quien resaltó su disposición a aprovechar al máximo el año de formación «y todo lo que sigue para crear nuevas oportunidades para la industria australiana y satisfacer las aspiraciones de todos los que se quedaron atrás».
Los nuevos cinco astronautas profesionales fueron seleccionados en 2022 entre 22.500 junto a una reserva de 12 compañeros, entre ellos la española Sara García.
Durante su formación básica se adentraron en la biología fundamental y las técnicas científicas de laboratorio, recibieron formación médica, perfeccionaron sus conocimientos técnicos con formación sobre sistemas de naves espaciales, ingeniería de vuelo, robótica y sistemas de soporte vital y tuvieron lecciones de astronomía, astrofísica y meteorología.
Un aspecto destacado de su formación fue la simulación de caminatas espaciales, además de simular las condiciones de lanzamiento y de vuelo en gravedad cero, así como las lecciones del idioma ruso en Alemania durante ocho horas al día.
«Después de dos meses teníamos el ruso en nuestra cabeza», explicó Sophie Adenot.
EFE
