El comandante de la Policía Metropolitana, General Eliécer Camacho, aseguró que la denunciante “manifiesta que utilizó mal sus palabras y en ningún momento desea realizar una denuncia formal”.
Se conoció un documento de la Fiscalía General de la Nación en el que se evidencia que la manifestante que denunció haber sido violada y torturada junto a otra de sus compañeras por parte de la Policía Nacional en un CAI de Medellín había informado inicialmente que «no fueron lesionadas como tampoco presentaban problemas que pusieran en riesgo su salud» y por tanto no aceptaron realizarse la prueba de Medicina Legal.
A pesar de ello, horas después una de las manifestantes, ya en su casa, expresó en su cuenta de Facebook que había sido víctima de abuso sexual y que una de sus compañeras había sido violada sexualmente por parte de dos agentes de la policía en un CAI cercano. La denunciante dijo además que le estallaron piedras en los pies y que «tenía los zapatos llenos de sangre».
Este mensaje causó indignación en redes sociales, desatando una ola de protestas contra la Administración Municipal y la Policía Nacional. Por ello, el Alcalde de Medellín, Daniel Quintero, pidió en un Consejo Extraordinario de Seguridad para la Mujer realizar una investigación de fondo que permitiera determinar la veracidad de los hechos.
Por esta razón, un equipo de la Personería, en compañía de la coordinación de Derechos Humanos de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, realizaron una visita a la joven denunciante la cual ya había borrado su mensaje de Facebook y manifestó que «utilizó mal sus palabras y que en ningún momento desea realizar una denuncia formal.» Así lo Informó el Comandante de la Policía Metropolitana, Brigadier General Eliécer Camacho.
A pesar de ello, la Alcaldía realizó el día de hoy 19 de junio un Consejo Extraordinario de Seguridad para la Mujer en el que el Alcalde solicitó a la Fiscalía realizar una investigación de oficio que permita determinar el fondo de los hechos, y si es necesario iniciar una investigación por los delitos de injuria y calumnia.