Continúan suspendidas las actividades en las áreas ecológicas y ambientales de la ciudad, en atención a la emergencia sanitaria nacional y a las medidas de prevención y contención ante la llegada del coronavirus.
Pese a la prohibición, durante la cuarentena se ha registrado la presencia diaria de 250 a 300 personas en cerros como Asomadera, Tres Cruces y Picacho. Muchos acuden allí para hacer ejercicio, pero también se han identificado aglomeraciones para celebrar cumpleaños, hacer pícnics y campamentos.
Por esta razón, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá hace presencia en estos lugares para aplicar las sanciones correspondientes. Los infractores deberán pagar multas hasta de $936.320.
A la par, los promotores ambientales de la Alcaldía de Medellín desarrollan jornadas pedagógicas y de sensibilización para recordar que el ingreso a estas áreas está prohibido, cuáles son los cuidados preventivos, los protocolos de limpieza al llegar a casa y los horarios autorizados para hacer ejercicio.
“Seamos corresponsables y conscientes de que la cultura ciudadana y el acatamiento de estas medidas es el primer paso para cuidarnos y cuidar a los demás”, fue la invitación de la secretaria de Medio Ambiente de Medellín, Diana María Montoya.
Esta restricción aplica para los cerros tutelares Tres Cruces, Nutibara, La Asomadera, El Volador, El Picacho y Pan de Azúcar (Jardín Circunvalar). Así mismo, los predios para protección de microcuencas en los corregimientos, los ecoparques de quebradas, el morro de Moravia y la Reserva Alto de San Miguel.