Categoría: Análisis Urbano

En la mencionada reunión, los comerciantes tuvieron que entregar, mediando una amenaza, sumas entre $250.000 y $1.000.000, “en medio del estupor y del miedo que producen dichas amenazas. No terminaban de contar las últimas monedas de las ventas producidas en la semana y los presionaron para que entregaran una buena parte de sus ingresos producidos en las festividades”, agrega el escrito.

Pero, estas balaceras no estarían relacionadas a la contienda que sostienen los “duros”: alias Tom, alias Carlos Pesebre y alias Douglas, sino que obedecen a rencillas menores entre muchachos pobres, desescolarizados y armados que quieren marcar territorio.