La Asociación Minga rechazó estos hechos “que atentan contra el legítimo derecho a la movilización social, y profundiza la grave crisis de este territorio donde el Estado colombiano no da garantías a sus pobladores para iniciar un efectivo proceso de sustitución de cultivos de usos ilícito”.
A pesar de la presencia del Esmad, los agresivos manifestantes tomaron las vías de hecho. En la mañana de este jueves 4 de abril, según denunció la Organización Nacional Indígena de Colombia, Onic, las instalaciones del CRIC continuaban en grave riesgo de ser incendiadas y los ataques del día anterior se estaban intensificando.
Los mingueros hicieron un llamado a las autoridades competentes para que brinden una protección oportuna y efectiva a los comunicadores. Además, solicitaron que se investiguen los hechos y se tomen las acciones legales pertinentes por los acontecimientos ocurridos, los cuales “constituyen una violación a la libertad de prensa”.