El alcalde de Cali, Maurice Armitage, quién decidió implementar la misma estrategia ejecutada en Medellín, al abrirle las puertas del clásico valluno a las dos hinchadas, debe de entender que todo es un proceso y que la ciudad aún no está preparada para tal evento.
No podemos olvidar que en esa comuna el tema de la seguridad es sensible, complejo y peligroso. No se le ha puesto atención, a pesar de que se han desatado varias guerras desde 2014 hasta 2016 a manos de las Convivir, el cuerpo armado de la Oficina del Valle de Aburrá en el centro, 35 de ellas están a lo largo y ancho del territorio.
Durante décadas, criminalidad y violencia han asolado a la ciudad de Medellín y su área metropolitana, cada cuatrienio los aspirantes a alcaldías y gobernaciones le presentan a la ciudadanía...