El suboficial retirado estaba armado, pero los delincuentes no se percataron de ello. La víctima del hurto persiguió al hombre que vio guardar en un bolso sus pertenencias. Cuando se vio perseguido, el ladrón apuntó con el arma al exsargento, que reaccionó de inmediato, propinándole cuatro disparos.