Según lo establecido en las investigaciones, el arsenal bélico iba a ser enviado a un grupo de las AGC o Clan del Golfo que delinque en los municipios antioqueños de Ciudad Bolívar, Salgar y Tarso; poblaciones del Suroeste antioqueño donde serían utilizadas para la distribución de estupefacientes, la extorsión y los homicidios selectivos.
El coordinador de la Unidad de Desastres del Dapard, capitán René Bolívar, relató que además otra persona resultó herida. Se trata de una mujer que fue arrastrada un kilómetro y quien presenta laceraciones y contusiones.
El suboficial retirado estaba armado, pero los delincuentes no se percataron de ello. La víctima del hurto persiguió al hombre que vio guardar en un bolso sus pertenencias. Cuando se vio perseguido, el ladrón apuntó con el arma al exsargento, que reaccionó de inmediato, propinándole cuatro disparos.
El día anterior, lunes 31 de diciembre, fueron hallados con heridas de arma de fuego los cadáveres de Cristian Ortiz Ávila y Julián Roberto Mora Correa. El hecho fue reportado en la vereda El Progreso, de Itagüí.