De igual forma fueron capturados hombres encargados de las falsificaciones, conocidos como alias Pipe y alias el Flaco, cuatro ejecutores de los hurtos de motocicletas y en algunos casos de vehículos, y nueve personas encargadas de la comercialización de los elementos hurtados a través de páginas web de internet y de manera personal.
La mujer, presa del pánico, lanzó la llave hasta el otro lado de la calle y luego corrió a refugiarse. El delincuente, sin guardar el arma, se fue hasta la llave, la recogió, se subió al auto, puso el arma en la silla del copiloto, encendió el carro y salió en veloz carrera.