Luego que este grupo delincuencial, los Suplantadores del Clan, cometía los hurtos de los vehículos, los trasladaban hasta el departamento de Chocó, para ser comercializados como autopartes o utilizaban la modalidad del ‘gemeleo’ para ser vendidos con mayor facilidad, alterando su sistema de grabación y los documentos. Dicha actividad ilegal, generaba a estas personas unas ganancias que superaban los $840.000.000 anuales.
A partir de ese momento se activó la red de participación cívica de la región. La información de testigos del caso llegó a las autoridades, quienes de inmediato iniciaron la búsqueda de estas personas por tierra y aire gracias a la coordinación entre el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional.