El año pasado, Orellano Rolón enfrentó cargos por porte ilegal de armas.
NORTE DE SANTANDER, COLOMBIA. (28 JUL 2025) – La violencia en la vía que conduce a la vereda Urimaco, en San Cayetano, continúa cobrando vidas. En menos de dos semanas, tres hombres han sido asesinados en circunstancias similares: a bala, con el casco puesto y sin sus motocicletas. La más reciente víctima fue identificada como Jairo Antonio Orellano Rolón, conocido como alias Kiko, presunto integrante del ELN.
De acuerdo con lo reportado por La Opinión. El hallazgo ocurrió el sábado 26 de julio, hacia las 7:00 p.m., cuando vecinos de la zona encontraron el cuerpo de Kiko tendido bocarriba, con múltiples impactos de bala, pero sin rastro de su moto. La Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) fue alertada de inmediato, pero debido a la peligrosidad de la zona, una funeraria fue la encargada de realizar el levantamiento del cadáver.
Un homicidio que abre nuevas hipótesis
Inicialmente, las autoridades manejaron la hipótesis de un asesinato motivado por el robo de la motocicleta. Sin embargo, al conocerse la identidad de la víctima, cobró fuerza la versión de un posible ataque de otro grupo al margen de la ley, en una zona donde se han registrado tensiones entre estructuras armadas ilegales.
La investigación también busca esclarecer si la muerte de Kiko está relacionada con sus antecedentes judiciales y presuntas actividades ilícitas.
Antecedentes de ‘Kiko’
En noviembre de 2024, Orellano Rolón fue capturado en la vereda 20 de Julio, en El Zulia, por porte ilegal de armas. En ese momento, las autoridades informaron que sería integrante del Frente Juan Fernando Porras Martínez del ELN, vinculado a delitos como reclutamiento forzado de menores, instalación de campos minados, extorsión y robo de vehículos.
Pese a haber sido presentado ante la Fiscalía, meses después recuperó su libertad por motivos que no fueron aclarados. Ahora, su asesinato genera nuevas dudas y abre el debate sobre un posible reacomodamiento de estructuras criminales en el área metropolitana de Cúcuta.
Un punto crítico de violencia
La vía de acceso a Urimaco se ha convertido en escenario recurrente de homicidios. Este caso se suma a los asesinatos de Juan José García Fuentes y Javier Peñaloza, ocurridos en circunstancias similares en días pasados, lo que aumenta la preocupación de los habitantes de San Cayetano y zonas aledañas.
Las autoridades mantienen abiertas todas las líneas de investigación, mientras los residentes exigen mayor seguridad en una región golpeada por la presencia de grupos armados y el aumento de la violencia.
A.U.
La información contenida en este artículo de prensa corresponde a la narración de los hechos noticiosos objetivos, suministrados por los funcionarios encargados de adelantar las investigaciones penales al interior de la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación. Para el momento de la divulgación de este comunicado, la situación jurídica de la(s) persona(s) relacionada(s) se encuentra pendiente de resolver por la autoridad judicial competente, siempre bajo los preceptos de la presunción de inocencia, consagrados en el artículo 29 de la Constitución Política y el artículo 7º de la Ley 906 de 2004.