Kiev, 20 de diciembre de 2021.- El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, recibió este lunes un espaldarazo de sus dos principales aliados, Polonia y Lituania, en su lucha contra la amenaza de invasión rusa y la conversión de Bielorrusia en una plataforma de tensión regional.
«Debemos hacer todo lo posible para evitar un ataque militar de Rusia contra Ucrania», dijo el presidente polaco, Andrzej Duda, en una rueda de prensa conjunta con Zelenski y el presidente lituano, Gitanas Nauseda.
EL TRIÁNGULO DE LUBLIN
En el marco de la reunión celebrada hoy en el formato denominado como el Triángulo de Lublin, los tres mandatarios firmaron una declaración conjunta sobre la cooperación en áreas de seguridad, prevención de migración ilegal y lucha contra la desinformación.
Los líderes de Polonia y Lituania expresaron asimismo su apoyo a Ucrania, que se enfrenta a la amenaza de un posible ataque ruso este invierno por la concentración de más de 90.000 tropas en la frontera común.
También respaldaron las aspiraciones de Kiev de ingresar en la Unión Europea (UE) y la OTAN, algo a lo que se opone categóricamente Moscú.
RECHAZO AL «ULTIMÁTUM RUSO»
Durante la reunión con Zelenski en la residencia presidencial ucraniana en los Cárpatos, los mandatarios de Polonia y Lituania tacharon de «inaceptable» la iniciativa rusa sobre garantías de seguridad en Europa que pretende evitar la entrada de Ucrania en la OTAN en un futuro.
«La seguridad de Ucrania es un asunto fundamental», dijo Duda y agregó que Occidente no debe hacer «concesiones a Rusia», ya que «es Rusia la que debe dar marcha atrás», afirmó.
A su vez, Nauseda reiteró que «habrá consecuencias graves» para Moscú si intenta imponer sus «líneas rojas» a países independientes.
Rusia dijo previamente que si Ucrania se une a la Alianza Atlántica o la OTAN despliega armamento de ataque en ese país, se cruzaría una «línea roja» para Moscú.
Así lo estipula además la propuesta sobre garantías de seguridad que Moscú remitió la semana pasada a Washington y que busca además la retirada de la OTAN de los países del espacio postsoviético.
«No tenemos que aceptar esos ultimátums. Si miramos el asunto desde una perspectiva histórica, podemos extraer algunas lecciones. Y es que cuando se aceptan los ultimátums de un país con un gran potencial militar, eso conduce a una agresión militar por parte de ese Estado y a la guerra», dijo Duda.
El dirigente polaco confió en que otros miembros de la OTAN compartirían ese enfoque y darían una «fuerte respuesta conjunta» a Rusia.
DESAFÍO BIELORRUSO
Según los mandatarios de Ucrania, Polonia y Lituania, la vecina Bielorrusia ya «no es un país independiente» a raíz de su creciente integración con Rusia y se convierte en un auténtico desafío para los países de la región.
En particular, los procesos de integración militar entre Minsk y Moscú representan una «amenaza para los países bálticos» y otros estados de la zona, opinó el dirigente lituano.
«Si antes de las elecciones (presidenciales) de 2020 todavía se podía hablar de la independencia de Bielorrusia hasta un cierto punto, ahora podemos olvidarlo», afirmó Nauseda.
En este sentido, señaló que debido a la integración con Bielorrusia, Rusia tiene ahora capacidad para aumentar el número de tropas que moviliza en las fronteras con la UE.
En su opinión, la Alianza Atlántica debe reaccionar a ello aumentando su presencia militar en el flanco oriental y elaborando «un algoritmo para contrarrestar las amenazas en la región».
SANCIONES PREVENTIVAS
El anfitrión de la cumbre, Volodímir Zelenski, aprovechó la reunión para pedir sanciones «preventivas» contra Rusia para disuadirla de agresiones contra otros países.
«Algunos líderes europeos dicen que si (el presidente ruso, Vladímir) Putin continúa la escalada, entonces impondremos sanciones. ¿Qué significa entonces?», preguntó Zelenski.
El mandatario ucraniano aseguró que las sanciones deben tener un carácter preventivo para evitar que Rusia inicie una escalada en «cualquier región» del mundo.
«Porque estamos viendo que esto no solo le concierne a Ucrania», aseveró al tiempo de agregar que las restricciones contra Moscú deben ser «severas».
Zelenski aseguró que Kiev no dudó en echar una mano a su vecina Moldavia durante la reciente crisis energética y a Lituania, durante la crisis migratoria.
«Por eso, ahora nos reunimos con nuestros amigos de Polonia y Lutuania, que entienden que ahora somos nosotros los que necesitan su ayuda», dijo.
Olga Tokariuk
EFE