Bamako, 3 enero.- La organización yihadista Nusrat al Islam wal Muslimín (grupo de defensa del islam y los musulmanes), vinculada a Al Qaeda, se ha atribuido el ataque que mató el pasado lunes a tres militares franceses en Mali.
De acuerdo con un comunicado publicado anoche en los foros yihadistas, el grupo ha informado de que sus combatientes hicieron explotar un artefacto al paso de un vehículo blindado en el que iban los soldados fallecidos.
El ataque tuvo lugar en la carretera que une las ciudades malienses de Kossi y Hombori, situadas en una zona conocida como la región de las tres fronteras (con Burkina Faso y Níger).
El Palacio del Elíseo informó el pasado lunes de que los tres militares franceses que perdieron la vida, un jefe de Brigada y dos soldados, pertenecían al primer regimiento de cazadores de Thierville-sur-Meuse, en la región francesa de Lorena, un cuerpo de infantería especialmente entrenado para la acción rápida.
En la última semana, el Ejército francés ha perdido a cinco militares en Malí, después de la muerte este sábado de otros dos miembros de su fuerza antiterrorista desplegada en el país cuando su vehículo fue alcanzado por la explosión de un artefacto al norte de la ciudad maliense de Ménaka (noreste).
El ataque de ayer aún no ha sido reivindicado por ningún grupo, aunque el «modus operandi» se asemeja al de las filiales de Al Qaeda en la región.
En total, Francia ha sufrido 51 bajas entre sus fuerzas en el Sahel desde que a comienzos de 2013 el entonces presidente, François Hollande, lanzara una operación para evitar que los grupos terroristas que se habían hecho fuertes en varias regiones de Mali consiguieran el control total del país.
En la actualidad, en el marco de la misión denominada Barkhane, hay más de 4.000 militares franceses repartidos en cinco Estados del Sahel (Mali, Mauritania, Níger, Chad y Burkina Faso) con el objetivo declarado de prestar apoyo a los ejércitos locales e impedir que se formen allí santuarios terroristas.