Quito, 14 mar – Un total de 56 personas trabajan para contener y remediar la fuga de petróleo que afecta desde el jueves a la provincia ecuatoriana de Esmeraldas, debido a la rotura de un oleoducto que ha vertido combustible al cauce del río Esmeraldas y del que se abastece de agua la ciudad homónima.
La petrolera estatal ecuatoriana Petroecuador indicó este viernes -en un comunicado- que en estas labores están empleados también siete excavadoras, quince camiones cisterna, siete camiones más, además de bombas, diques de contención y equipos de succión.
La fuga se dio en el Sistema de Oleoductos Transecuatoriano (Sote), a la altura del sector El Vergel, en el municipio de Quinindé, y fue atribuido preliminarmente por Petroecuador a un deslizamiento de tierra producto de las lluvias caídas en las últimas semanas.
La compañía estatal confirmó que los trabajos de retención y limpieza se concentraron en tres diferentes puntos de control, desde donde se implementaron diques de contención, colocación de barreras y labores de recuperación manual del fluido y del suelo.
Según aseguró la empresa, por el momento el bombeo de crudo a través del Sote se encuentra retenido pero el transporte de petróleo continúa por una «línea secundaria» sin afectar el volumen de exportaciones.
Las tuberías afectadas se encargaban de transportar los hidrocarburos desde los pozos situados en la Amazonia hasta la costa, donde es refinado y embarcado en buques petroleros para su exportación a otros países.
Debido a esta fuga, la Empresa de Agua Potable y Saneamiento (Emapse) de la ciudad de Esmeraldas, que se encuentra situada a pocos kilómetros de la frontera con Colombia, suspendió temporalmente la captación de agua del río afectado para evitar la contaminación en la planta potabilizadora del municipio.
«Exhortamos a la comunidad a racionar el consumo de agua», señaló a través de un nuevo comunicado la Alcaldía de Esmeraldas.
Ecuador sufre desde principios de año lluvias intensas que hasta el momento han provocado el fallecimiento de 19 personas, la afectación de otras 100.000 y la destrucción de 127 viviendas en todo el país.
EFE