San Salvador, 12 feb – Cerca de 7,3 millones de personas de los países del Triángulo Norte -El Salvador, Guatemala y Honduras- se encuentran en una crisis o emergencia de inseguridad alimentaria, informó este viernes el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).
La fuente, que retoma los datos del informe de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF), señaló que esta situación se vio afectada «mayormente» por la pandemia de la covid-19 y se agudizó por las tormentas Eta e Iota.
Indicó que en el caso de Honduras y Guatemala los huracanes Eta e Iota dañaron cultivos de granos básicos, hortalizas y cultivos de agroexportación, provocando alza de precios, pérdida de cosechas y de ingresos económicos de las familias.
En el caso de El Salvador, según el informe, de noviembre 2020 a febrero de 2021, 684.000 personas (10 % de la población analizada) se encuentran en crisis alimentaria o peor, por lo que se «requieren acciones urgentes». De estas personas, 589.000 se encuentran en crisis y 95.000 en emergencia.
Se prevé que para agosto de 2021 al menos 1,04 millones estarán en crisis o emergencia de inseguridad alimentaria aguda, apuntó.
En el análisis realizado en Honduras se identificó que 2,9 millones de hondureños (31 % de la población analizada) se encuentran en crisis o emergencia alimentaria y, según proyecciones, a septiembre de 2021 los afectados podrían llegar a 3,3 millones de personas.
Mientras, se estima que en Guatemala 3,7 millones de personas (23 % de la población) se encuentran en crisis o emergencia alimentaria, esto es equivalente a 820.000 hogares.
El secretario general del SICA, Vinicio Cerezo, ha expresado que los desafíos en inseguridad alimentaria y nutricional solo se pueden enfrentar como bloque y de forma articulada.
El Informe Global sobre Crisis Alimentaria, publicado en abril de 2020, advirtió que El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua antes de la pandemia la covid-19 poseía un incremento de la inseguridad alimentaria y nutricional de 4,4 millones de personas en condiciones de crisis o emergencia durante el 2019.
Antes de la pandemia y los huracanes Eta e Iota, Centroamérica ya enfrentaba problemas de desnutrición crónica e inseguridad alimentaria nutricional, un escenario que se volvió más complejo, agrega.
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