Tokio, 9 abr – El primer ministro de Japón, Shigeru Ishiba, y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, acordaron este miércoles estrechar la colaboración entre sus respectivas industrias de defensa, ante los desafíos comunes que ven en China y Rusia.
El líder nipón y el responsable de la alianza atlántica se comprometieron a «reforzar su cooperación» en ese ámbito y en otros como la ciberdefensa y la seguridad marítima, según dijo Rutte en una comparecencia ante los medios tras la reunión mantenida en Tokio.
Las áreas señaladas para la mayor cooperación industrial incluyen el desarrollo de tecnologías avanzadas de doble uso.
Rutte afirmó que esta mayor colaboración es «crucial» en un momento marcado por el «giro en la situación de la seguridad» tanto en el Atlántico como en el continente europeo y en la región del Indopacífico.
«Rusia continúa emprendiendo su guerra contra Ucrania, su economía está en modo bélico y no ha abandonado sus ambiciones de remodelar la seguridad europea», destacó el secretario general de la OTAN durante la segunda y última jornada de su visita a Japón.
«Mientras, China persigue una militarización a gran escala y busca controlar tecnologías clave, infraestructuras críticas y cadenas de suministros», dijo Rutte, quien también acusó a Pekín de «continuar con sus actividades de desestabilización en el Indopacífico».
También señaló a Corea del Norte por «enviar tropas y armas que son usadas contra Ucrania» a cambio del apoyo ruso a programas armamentísticos norcoreanos.
Rutte calificó a Japón como «uno de los socios más valiosos» de la alianza atlántica, y alabó la asistencia prestada por Tokio a Ucrania frente a la invasión rusa, así como el reciente incremento del gasto militar del país asiático.
Ishiba, por su parte, agradeció la mayor involucración de OTAN en la región del Indopacífico, cuya seguridad «está estrechamente conectada» con la del Atlántico.
Japón comenzó en 2024 a aumentar su gasto militar de forma significativa con la meta de situarlo a un nivel cercano al objetivo del 2 % del producto interior bruto entre países miembros de la OTAN, y de emprender su mayor rearme desde el final de la II Guerra Mundial dotándose de nuevo armamento como misiles de largo alcance o hipersónicos.
La visita de Rutte a Japón es la primera desde que asumió el cargo el pasado octubre, y se enmarca en la creciente cooperación entre ambas partes a través de la invasión rusa de Ucrania.
La OTAN también ha expandido su colaboración en los últimos años con otros países de la región como Corea del Sur, Australia o Nueva Zelanda, frente al auge militar de Pekín.
Además de reunirse hoy con Ishiba, Rutte mantuvo un encuentro en la víspera con el ministro nipón de Defensa, Gen Nakatani, y visitó la base naval estadounidense de Yokosuka (sur de Tokio), y unas instalaciones del gigante tecnológico nipón Mitsubishi.
Durante esa reunión, Nakatani expresó el interés de Japón en sumarse al comando conjunto de la OTAN que coordina el entrenamiento militar y el material que se le ofrece a Ucrania, denominado NSATU por sus siglas en inglés y ubicado en la base estadounidense en Wiesbaden (Alemania).
EFE