SEÚL, COREA DEL SUR (9 MAY 2024) – El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, prometió este jueves crear un nuevo ministerio para impulsar la natalidad y también pidió disculpas por la «imprudencia» de la primera dama, Kim Keon-hee, a la que se investiga por un presunto delito de soborno tras haber aceptado un bolso de diseño como regalo.
En un discurso pronunciado con motivo del segundo aniversario de su llegada al poder, Yoon prometió crear un nuevo ministerio «de planificación para responder a la baja natalidad», que estaría encabezado por un ministro que también actuaría como viceresponsable de la cartera de Asuntos Sociales.
El presidente prometió nuevas políticas en los sectores educativo, laboral o de ayudas para apoyar la conciliación y pidió la cooperación de la oposición -que ha reforzado su mayoría en el Parlamento tras la abultada derrota del Partido del Poder Popular (PPP) de Yoon en las legislativas del pasado 10 de abril- para tramitar las leyes que permitan crear el nuevo ministerio.
Corea del Sur tiene la tasa de fertilidad femenina más baja de entre los 38 miembros de la OCDE, un problema que Yoon, al que los surcoreanos han castigado en las recientes parlamentarias por considerarlo desconectado de los problemas diarios de sus conciudadanos, calificó hoy de «emergencia nacional».
«Durante dos años hemos intentado mejorar la vida de los surcoreanos, pero fue insuficiente. En los próximos tres años escucharemos la voz de la gente con humildad», explicó Yoon en referencia al batacazo en las urnas y al trienio que le resta en el poder en una posición aún más debilitada tras la contundente victoria del opositor y liberal Partido Democrático (PD).
«Pido perdón por importunar a la gente debido a la imprudencia de mi mujer», dijo a su vez Yoon en una rueda de prensa -la segunda que brinda desde que llegó a la presidencia hace exactamente dos años- inmediatamente posterior a su discurso.
Yoon no quiso comentar nada más a ese respecto, argumentando que no quiere influir en la investigación que lleva a cabo la fiscalía general.
El llamado «escándalo del bolso Dior», fue recogido en un vídeo grabado en septiembre de 2022 por un pastor protestante que, en connivecia con un medio digital antioficialista, recogió en las imágenes cómo la primera dama recibía un bolso de Dior valorado en más de 2.200 dólares de manos del religioso.
Esto puede constituir un delito, puesto que la ley anticorrupción nacional considera ilegal que un funcionario o sus cónyuges reciban regalos valorados en más de un millón de wones (unos 730 dólares) de una vez o por un valor acumulado superior a 3 millones (unos 2.195 dólares) durante un ejercicio fiscal.
El caso ha cobrado de nuevo relieve tras la dura derrota electoral del PPP, junto con las alegaciones de que la primera dama supuestamente también cometió un delito de manipulación de activos bursátiles entre 2009 y 2012.
En enero Yoon tuvo que ejercer su veto presidencial sobre una moción del PD para investigar ese supuesto delito de manipulación del precio de activos, pero tras el resultado electoral la oposición ha vuelto a la carga pidiendo el establecimiento de una investigación especial en torno al caso.
Sin embargo el presidente dijo hoy que ese tipo de investigación debería producirse solo cuando se determine que la fiscalía y otros organismos no han hecho adecuadamente su trabajo y que hacerlo de partida tendría una clara motivación política.
EFE