Moscú, 30 junio.- El presidente de Rusia, Vladímir Putin, cuestionó hoy la pertinencia de reunirse con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, al que acusó de haber dejado las riendas del país en manos extranjeras.
«¿De qué vale reunirse con Zelenski si ha dejado que el país sea totalmente controlado desde el exterior?», preguntó el mandatario ruso durante el programa anual Línea Directa con los ciudadanos.
Putin afirmó que «los asuntos clave de Ucrania no se deciden en Kiev, sino en Washington y, en parte, en Berlín y París».
Alemania y Francia forman parte del denominado Formato de Normandía, junto a Rusia y Ucrania, que trata de resolver el conflicto en el este ucraniano, donde se enfrentan desde 2014 los rebeldes prorrusos y el Ejército.
Sin embargo, Putin añadió que no se niega a reunirse con Zelenski, «pero es necesario comprender de qué vamos a hablar».
El mandatario ruso señaló que no considera «inamistoso» al pueblo ucraniano, pero «el actual liderazgo del país es claramente inamistoso», algo que según anunció, abordará próximamente en un artículo analítico.
«Espero que la gente lo lea tanto en Rusia como en Ucrania. En él expresaré mi punto de vista al respecto», indicó.
Putin aprovechó la ocasión para volver a arremeter contra el proyecto de ley presentado por Zelenski sobre los pueblos autóctonos de Ucrania, que no incluye a los rusos, al defender que rusos y ucranianos son un solo pueblo y comparar el proyecto con un «arma de exterminio en masa».
A fines de abril Zelenski pidió a su oficina que organizase una reunión con su homólogo ruso para poner fin al conflicto armado en el Donbás.
Putin afirmó entonces que estaba dispuesto a recibir a su colega ucraniano «cuando mejor le venga», pero solo para hablar de las relaciones bilaterales.
El Kremlin afirma que no forma parte del conflicto en el este de Ucrania y que Kiev tiene que hablar con los separatistas y no con Moscú, en tanto que el país vecino acusa a Rusia de ser el Estado agresor al apoyar política, financiera y logísticamente a los rebeldes prorrusos.
Los dos presidentes no se han visto desde la cumbre de líderes del Formato de Normandía que se celebró en diciembre de 2019 en París.