Balaceras no se detienen en Altavista y Mano de Dios

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En la tarde del lunes 30 de abril y en la mañana del martes 1 de mayo se escuchó un incesante tronar de balas que hizo entrar en pánico a la comunidad que habita en las veredas La Esperanza, Aguas Frías, San Pablo, El Corazón, El Morro, San José del Manzanillo, El Jardín, Buga, Patio Bonito y, principalmente, la parte Central, en los barrios Manzanares y Mano de Dios, este último ubicado en la parte baja, en el límite con Belén, comuna 16.

Altavista es un corregimiento que está localizado al suroccidente de Medellín y en el cual desde hace cinco años se presentan enfrentamientos entre combos que se disputan el control territorial y el dominio del corredor estratégico que representa el cerro Manzanillo.

En ese sector limítrofe se enfrentan siete estructuras criminales: El Tanque, Cantarranas, Zafra, Mano de Dios, los Chivos-Pájaros, Buenavista y los Paracos. Todos ellos reciben apoyo de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), de la Oficina y de la Alianza del Norte (integrada por las estructuras Pachelly, Chatas, los Mesa, Chamizos, Triana y La Raya).

Habitantes del lugar indicaron que con algunas intermitencias, las balaceras han continuado toda la semana anterior y esta semana que comienza, la del 1 de mayo, no se detienen.

Ayer lunes 30 de abril, en horas de la tarde, en medio de una de las balaceras, fue asesinado Yeison Daniel Sepúlveda Martínez, de 20 años.

La Defensoría del Pueblo advirtió que en el corregimiento Altavista se están cometiendo constantes violaciones a los Derechos Humanos y ha aumentado la deserción escolar, los enfrentamientos armados y las extorsiones.

La Policía indicó que va tras los cabecillas de las estructuras criminales que están causando miedo en Altavista. Asimismo, dijo a sus habitantes que pueden estar seguros de que la Fuerza Pública despliega todas sus capacidades para lograr su tranquilidad y convivencia.