El pasado 3 de enero el ministro de Defensa, Guillermo Botero, anunció la captura de Juan Pablo Úsuga Torres, alias Reseco, procedimiento que fue realizado por la Dijín de la Policía Nacional en un inmueble ubicado en el barrio Pueblo Nuevo, centro del municipio de Carepa, Urabá antioqueño.
Alias Reseco es hermano de Arley Úsuga Torres, alias 07 o Mata Policías, quien ya se había cambiado el nombre por Juan Carlos Úsuga, alias Mata Policías, fue capturado en diciembre de 2013 y en febrero de 2016 fue extraditado a los Estados Unidos por solicitud de una Corte de la Florida.
¿Quién sería alias Reseco?
Fuentes de inteligencia consultadas por Análisis Urbano dan cuenta que Juan Pablo Úsuga Torres es un personaje relevante dentro de la estructura de las AGC o Clan del Golfo, especialmente en el frente Carlos Vásquez, asumió la parte financiera luego de la muerte de José Abel Bustamante, alias Mordisco, dicho personaje sería el segundo de alias Pueblo o Pueblito.
Reseco se estaba moviendo entre Carepa, Chigorodó, Mutatá y Saiza (Córdoba). Además es el sobrino de Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, máximo líder de las AGC o Clan del Golfo.
Otras fuentes consultadas van más allá, afirman que Reseco además de ser una “firma”, estuvo con 07 y Pueblo trabajando con Carlos Mario Tuberquia Moreno, alias Nicolás, quien fue capturado el 5 de agosto por las autoridades colombianas, aunque se especula que se habría entregado.
Reseco estaría en la parte militar, finanzas y manejo de narcotráfico. Se le considera una persona acaudalada y podría haber sido llamado a ser el sucesor de Luis Orlando Padierna, alias Inglaterra, dado de baja el 23 de noviembre de 2018 en una lujosa finca en el municipio de Chinácota, Norte de Santander.
Alias Reseco vivía junto a Federico Gutiérrez Zuluaga
Pero no fue solo la captura de Juan Pablo Úsuga Torres la que llamó la atención (un golpe importante a las AGC). También lo fue que este personaje estuviera viviendo cómodamente durante varios meses en un conjunto residencial ubicado en el barrio El Poblado, donde también habita el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, quien según la Fiscalía y la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, Meval, ha sido objeto de seis planes criminales para atentar contra su vida.
¿Qué papel cumple la inteligencia policial de la Meval en Medellín y el resto del Valle de Aburrá?
Que uno de los personajes más importantes en la actualidad como es el caso de Alias Reseco, estuviera viviendo al lado de uno de los mandatarios más amenazados del país y quien cuenta con un robusto esquema de seguridad, debería reabrir el tema sobre el quehacer de la inteligencia policial en la ciudad metropolitana.
No es la primera vez que la inteligencia policial de la Meval queda en entredicho. Ya recientemente se han presentado no pocos casos, vale la pena enumerar algunos:
1. La presencia de miembros del Cartel de Sinaloa como Alfredillo el hijo del Chapo Guzmán, su estadía no pudo ser rebatida por la Sijín, la Meval y mucho menos por el alcalde de Medellín, habrían otros delegados del crimen trasnacional en la ciudad y el resto del Área Metropolitana.
2. El desconocimiento sobre la verdadera cúpula de la Oficina del Valle de Aburrá, en lo militar, financiero, Junta directiva, patrones y patrones de patrones. Solo han identificado una parte minúscula de las jefaturas.
3. La negación de la existencia de las AGC o Clan del Golfo, a pesar de las evidencias que muestran su presencia, el caso de alias Leo y Resaco, la presencia del bloque Sierra en la comuna 8, el Pacto del Fusil, así lo demostrarían.
4. La banda policial o Polibanda Los Magnificos, quienes tienen miembros activos y retirados de la Meval, algunos fueron capturados, según la Unidad Investigativa de El Tiempo, podrían haber oficiales al frente de la misma.
5. La situación de orden público en las comunas 7, 10, 11, 12, 13,15 y el corregimiento de Altavista, en estas zonas es solo presencia policial pero la inteligencia no actúa acorde con lo compleja de la situación.
6. La desaparición forzada de tres jóvenes en la comuna 13, en este episodio la inteligencia policial brilló por su ausencia.
7. El no identificar y desmantelar la nómina paralela que cobija miembros de la institución policial, entre ellos podrían haber oficiales que otorgan protección oficial al crimen urbano y rural.
8. Contrabando, pagadiario, tráfico de drogas, seguridad criminal, vacunas, explotación sexual, apuestas ilegales, alcohol adulterado en la comuna 10, Centro. En esta comuna es donde se ha podido demostrar las protuberantes fallas que en materia de inteligencia tiene la Meval, por ejemplo, 35 agrupaciones Convivir controlan el territorio. Extorsión y seguridad criminal son sus mayores objetivos, los verdaderos jefes del crimen urbano en esta comuna se pasean orondos por sus calles, entran sin ningún reparo sus mercancías ilegales, mueven holgadamente sus dineros, mientras las cámaras de seguridad y los cuadrantes persiguen al comercio informal, a la delincuencia común o algún capo quemado del crimen organizado.
9. La actual situación que vive el corregimiento de Altavista, allí la presencia policial y quien debería haber prevenido hechos violentos no se sienten aunque se vean, los criminales hacen y deshacen a su antojo.
10. Pornografía infantil, trata de persona, turismo sexual y rumba dura, sobre estos temas tan álgidos la respuesta de la inteligencia policial es casi nula, por nuestra ciudad llegan muchos extranjeros que vienen a participar de estos delitos.
11. El aumento en los homicidios, 628, en el 2018, las desapariciones forzadas que no son pocas al igual que alto número de desplazados intraurbanos, además de la existencia de casas de tortura y pique, podrían demostrar sin auscultar mucho que la inteligencia en la ciudad de Medellín y el resto del Valle de Aburrá, es hoy por hoy deficiente, por no decir mala. Parte de sus acciones se han encaminado a la realización de positivos para mejorar puntaje para futuros ascensos, una parte de estos positivos han terminado siendo falsos positivos judiciales.
Frente al nuevo hecho que representa un error garrafal de la inteligencia policial de la Meval y de quienes manejan el esquema de seguridad del alcalde de Medellín, ¿Quién saldrá a responder por lo acaecido? ¿Será que pasará lo de otras ocasiones donde los responsables de la seguridad se quedan callados?
Para la vicepresidente Marta Lucía Ramírez lo sucedido es “la tapa de la olla”. Pidió que de manera urgente se revisen las estrategias de inteligencia que tiene el Gobierno y cómo lograr verdadera eficacia en materia de inteligencia y contrainteligencia del Estado.
Apunte Urbano
Hace pocas horas el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, informó que estaba al tanto de la ubicación de Reseco, que la Policía Metropolitana lo tenía al tanto de lo que pasaba, lo dicho por el mandatario deja preguntas y dudas. Si se sabía que había un personaje como alias Reseco viviendo al lado del señor alcalde de Medellín, desde hace tiempo, ¿por qué no fue allanada la morada y capturado? ¿Por qué se tuvo que esperar para capturarlo en Carepa y allanar posteriormente la vivienda en Medellín? ¿Por qué el alcalde no sintió que estaba en riesgo?, ¿Será que no conocía el perfil de Juan Pablo Úsuga Torres, alias Reseco?
Respetuosamente desde Análisis Urbano le decimos al señor alcalde de Medellín y al comandante de la Meval: las explicaciones dadas no encajan. Nos reafirmamos en lo escrito anteriormente, hay fallas protuberantes en la inteligencia policial y no es bueno para la ciudad y su seguridad que se quiera ocultar lo evidente.
Esto sí ya francamente es la tapa de la olla!!. Es urgente revisar qué estrategia tenemos y cómo lograr verdadera eficacia en materia de inteligencia y contrainteligencia del Estado. https://t.co/jM2PvZFL6y
— Marta Lucía Ramírez (@mluciaramirez) January 6, 2019