Fue la petición realizada por los concejales de Medellín en plenaria virtual realizada este viernes 12 de junio, en la cual se analizó la problemática de los malos olores de la Planta de Tratamiento de Aguas, Ptar Aguas Claras de Empresas Públicas de Medellín-EPM, ubicada en el municipio de Bello y que representa afectaciones a la calidad de vida de los habitantes del sector.
Con relación al tema, Concejales que intervinieron manifestaron que una de las premisas de EPM es la responsabilidad social, por esta razón, solicitaron dar una solución urgente a esta problemática de la comunidad; a su vez, propusieron la creación de una mesa interinstitucional en compañía del Concejo, que contribuya a corregir las problemáticas que se presentan por estos olores.
Aseguraron que apoyan el propósito por el cual fue creada la Ptar Aguas Claras que es el de limpiar las aguas del Río Medellín y la compensación que genera al medio ambiente, sin embargo, aseguran es innegable el tema de los olores que se desprenden de la planta y lo cual aún no se tiene solución adecuada reconociendo que hay una dificultad, que es una realidad que está ocurriendo y es necesario dar una solución adecuada para mitigar el problema y brindar calidad de vida a las personas.
Propusieron a directivos de EPM realizar una nueva visita a los barrios vecinos de esta obra para verificar las afectaciones que se puedan estar ocasionando y que son denunciadas hoy por la comunidad de Bello.
También, solicitaron avanzar con prontitud en el cronograma de acciones faltantes para llegar a un cumplimiento del 100 por ciento en los compromisos con la comunidad y conocer si efectivamente, finalizadas esas actividades, se solucionará el tema de los olores.
Expresaron que detener el proyecto generaría un daño irreversible al medio ambiente, además de las pérdidas millonarias que se generarían. Agregaron que es preocupante la situación de las familias, pero también de la ciudad metropolitana, por lo cual insistieron en acelerar las acciones para que la comunidad no se siga viendo afectada por estos olores.
Por último, aseveraron que este proyecto ha sido mal ejecutado y presenta más de tres años de retraso sin tener fecha final de entrada en operación plena ocasionando problemas ambientales, de olores y de infraestructura, además de adiciones por $ 581.336 millones de pesos que representan más del 58 por ciento. Asimismo, la Planta de Biosólidos, que no estaba en los diseños iniciales, fue improvisada y tuvo un valor adicional por $160.000 millones de pesos.
A su turno, Santiago Ochoa, vicepresidente de Aguas y Saneamiento de EPM, presentó el avance en el control de olores de la Ptar Aguas Claras, resaltando que el propósito principal de la obra es impedir que las aguas sucias lleguen al Río, por ellos, en las plantas de tratamiento de San Fernando y Aguas Claras se tratan para que sean más limpias.
Agregó que con el tema de olores se ha generado un espacio de concertación para identificar con la comunidad cuáles son los puntos que ocasionan esta contaminación, se diseñaron 36 actividades, de las cuales se han realizado 21, las otras 15 se encuentran en desarrollo ya que el cronograma ha tenido modificaciones debido a la contingencia por el Covid 19, pero el compromiso es cumplir a las comunidades.
El secretario de Hacienda, Óscar Hurtado, expresó que el inconveniente de olores se genera en la planta de secado térmico de biosólidos, que reduce 360 toneladas húmedas de material a 120 toneladas secas diarias, pero estos olores no son nocivos para la salud según certificaciones sanitarias expedidas por diversas entidades, pero se continúa trabajando para dar respuesta permanente a las comunidades.
Durante la plenaria, el inspector Primero de Policía de Bello, Juan Sebastián Montoya, explicó que la decisión de cerrar esta planta obedece a las múltiples quejas interpuestas por la comunidad y que luego de ser analizadas, se detectó que la afectación a la salud es un problema no sólo físico si no mental, que involucra 150 mil familias, y se opta por proteger las comunidades y viviendas, actuando conforme a la Ley y a la protección de las familias y menores que viven allí. Añadió que no están en desacuerdo con el funcionamiento de la planta, pero es necesario que se brinde una solución rápida a esta problemática para mejorar la calidad de vida de la población y la protección del ambiente.
Para finalizar comunidad que intervino en la sesión, solicitó a EPM dar solución inmediata a esta situación de olores que para ellos les ha generado estrés, ansiedad, depresión, detrimento patrimonial a sus viviendas y negocios, y mala calidad de vida en el sector.