Antioquia, Colombia, marzo 9 de 2022- A 47 años de prisión fue condenado Sebastián Ocampo Montes por el delito de homicidio agravado de su madre Miriam de Jesús Ocampo Montes, de 55 años de edad; de su hermana Yéssica Alexandra Murillo Ocampo, de 30 años, y de su sobrino e hijo de esta última, José David Montes Murillo, de 14.
El jueves 19 de diciembre de 2019, vecinos de la vivienda en la que habitaban estas cuatro personas alertaron a la Policía por el mal olor que se desprendía de aquel inmueble ubicado en el barrio Artex del municipio de Itagüí, sur del Valle de Aburrá. Ese día fue hallado el cuerpo de Miriam, madre y abuela de las víctimas. El cuerpo mutilado fue encontrado en el segundo piso y junto a una poceta estaban los pies y las manos.
Peritos judiciales trasladaron las partes a Medicina Legal, donde comprobaron que pies y manos no correspondían a ese tronco. Algo no estaba bien. Nada estaba bien, pero parecía que iba a empeorar. Y así fue.
Fue necesario regresar para inspeccionar todo el lugar. El sábado 21 de diciembre en horas de la mañana el CTI halló en el lavadero, al lado de las escalas, bajo una losa de concreto, metidos en canecas y encostalados, los cuerpos de José David y de su mamá Yéssica.
Según la investigación, el triple crimen habría sido perpetrado el lunes 16 de diciembre. Para lograr su cometido, el hoy sentenciado alquiló, por intermedio de otra persona, una sierra eléctrica en un reconocido almacén ferretero. Dicha herramienta fue utilizada para cometer el delito.
El procesado se entregó a las autoridades el 22 de diciembre de 2019. Antes de iniciarse la etapa del juicio oral el procesado pretendió ser declarado inimputable, situación que fue desvirtuada luego de un examen siquiátrico realizado por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
Un Juez Penal del Circuito de Itagüí, Antioquia, lo condenó. La decisión de primera instancia fue apelada por la defensa ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín.
