La Paz, 24 noviembre.- El boliviano Diego Pary, quien fue canciller del expresidente Evo Morales, juró este martes como el nuevo embajador de su país ante las Naciones Unidas con el reto de retomar la defensa de la Madre Tierra y la «diplomacia de los pueblos» dejados de lado por el Gobierno transitorio de la exmandataria Jeanine Áñez.
En un acto en la Cancillería en La Paz, Pary juró ante el ministro de Relaciones Exteriores del país, Rogelio Mayta, con el puño izquierdo en alto, un gesto propio de los afines al gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS).
Pary agradeció la confianza para que ocupe ese cargo ante el «organismo más importante que tiene la humanidad» y sostuvo que el reto será «recuperar una diplomacia proactiva» que a su juicio «el golpismo ha destrozado», en alusión al Ejecutivo interino.
«Es tiempo de proyectar nuevamente nuestro vivir bien, nuestra diplomacia de los pueblos al contexto internacional, es tiempo de liderar la defensa de los derechos de la Madre Tierra, la naturaleza, de los pueblos indígenas, los derechos sociales», manifestó.
Por su parte, el canciller Mayta le instó a trabajar por la paz con «humanidad y solidaridad» teniendo en cuenta que representa la «voz» de todos los bolivianos ante ese organismo.
Pary fue el ministro de Exteriores de Bolivia desde 2018 hasta noviembre de 2019, cuando Evo Morales renunció a la Presidencia denunciando un supuesto golpe de Estado en su contra, en medio de denuncias de un fraude electoral a su favor en los fallidos comicios de octubre de ese año que son investigadas penalmente y que él niega.
Antes de ser canciller, también fungió como embajador de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en el periodo 2011-2018.
La mayoría parlamentaria del MAS designó a Pary, de origen quechua, como nuevo embajador ante la ONU.
El partido gubernamental apeló para ello a las modificaciones aprobadas por el Legislativo saliente, también controlado por el MAS, que permiten aprobar por mayoría simple este tipo de nominaciones y ya no con los dos tercios que se requerían antes para estas decisiones.
En las recientes elecciones generales, el MAS logró la mayoría en el Parlamento, pero no pudo revalidar los dos tercios que ostentó en los dos periodos legislativos previos.