Bogotá, 10 abr – La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia llamó al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso a rendir una versión libre sobre las masacres ocurridas en las localidades de La Granja y El Aro, en el departamento de Antioquia (noroeste).
«La JEP llama a Salvatore Mancuso a rendir versión sobre las masacres de La Granja y El Aro, en el marco del Caso 08, que investiga los crímenes cometidos por la fuerza pública en asocio con paramilitares, agentes del Estado o terceros civiles durante el conflicto», informó este miércoles ese alto tribunal en un comunicado.
Durante la diligencia judicial, que será reservada, los magistrados le preguntarán a Mancuso, entre otros hechos, por «el posible relacionamiento que tuvieron con grupos paramilitares algunos miembros de la fuerza pública, otros agentes del Estado y terceros civiles, y cómo ello incidió en las masacres de La Granja, en junio de 1996, y de El Aro, en octubre de 1997, en Ituango (Antioquia)».
Igualmente, Mancuso también deberá aportar información sobre la consolidación de las ‘Convivir’ y detallar cómo a través de estos grupos de vigilancia privados se «habrían ejecutado graves violaciones de derechos humanos contra integrantes de movimientos sociales».
Las Convivir fue el nombre dado a cooperativas de seguridad que acabaron financiando a paramilitares para combatir a las guerrillas.
La JEP resaltó que la información aportada por el exjefe paramilitar «constituye un insumo adicional para el proceso de contrastación de la información que la Sala de Reconocimiento debe realizar en la instrucción del Caso 08, y podrá ser llamado para rendir versión en otros subcasos».
La matanza de La Granja dejó en 1996 cuatro personas muertas y decenas de desplazados, y al año siguiente fue perpetrada la masacre de El Aro, con 15 campesinos como víctimas mortales, cometida también por las disueltas milicias paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), cuando el expresidente Álvaro Uribe Vélez era el gobernador del departamento de Antioquia.
Mancuso fue deportado el pasado 27 de febrero a Colombia desde Estados Unidos donde cumplió una condena de 15 años por narcotráfico, y desde entonces está recluido en la cárcel La Picota de Bogotá, ya que en Colombia es investigado por más de 75.000 crímenes.
EFE