San José, 6 de octubre del 2023 – La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) resaltó este viernes los logros de Costa Rica en materia ambiental, pero señaló que el país tiene mucho margen de mejora en asuntos como transporte y tratamiento de aguas para equipararse a los países más desarrollados.
La OCDE publicó este viernes la primera Evaluación de Desempeño Ambiental de Costa Rica, en el que destaca como puntos positivos que el país revirtió la deforestación en las últimas décadas y hoy tiene una cobertura forestal del 60 %, de la cual la mitad están en la categoría de área protegida.
Además, Costa Rica cuenta con alrededor del 6 % de la biodiversidad mundial, produce casi el 100 % de su energía eléctrica con fuentes renovables y disminuyó la emisión de gases de efecto invernadero en un 13 % en el periodo 2010-2017 gracias a la absorción de carbono de los bosques.
La directora adjunta de Medio Ambiente de la OCDE, Mathilde Mesnard, dijo en la presentación del informe que Costa Rica «tiene un muy buen progreso» y es «pionero» en programas para la protección de bosques, pero existen retos para «consolidar y ampliar sus avances».
Los desafíos más urgentes
Uno de los más urgentes retos es el consumo de combustibles fósiles en el transporte, ante lo que es «clave descarbonizar» ese sector, declaró Mesnard.
A pesar de que el país registró una reducción general en la emisión de gases de efecto invernadero, el sector transporte aumentó las suyas en un 11 % entre 2010 y 2021, indica el informe de la OCDE.
Una de las recomendaciones de la OCDE es invertir en el mejoramiento del transporte público para reducir la dependencia de los automóviles y potenciar el uso de tecnologías como los vehículos eléctricos.
El informe también muestra que Costa Rica prevé que a 2025 los daños por fenómenos extremos relacionados al clima podrían representar entre el 1,6 % y el 2,5 % del Producto Interno Bruto y que la crisis climática también puede llegar a afectar la disponibilidad de agua para la actividad agropecuaria y la energía hidroeléctrica.
Otro desafío de Costa Rica es la calidad del aire, que va ligada al transporte, pues más del 88 % de la población en áreas urbanas está expuesta a «niveles nocivos de contaminación». Estos niveles superan 3 veces a los límites recomendados por la OMS.
La OCDE también recomendó a Costa Rica aumentar la inversión en infraestructura de saneamiento de agua, pues solo el 30 % de la población tiene acceso a servicios de saneamiento y tres cuartas partes de la población vierte sus aguas residuales en fosas sépticas.
La OCDE señaló que la transición hacia una economía verde y descarbonizada requiere de «inversiones a gran escala», por lo que recomendó a Costa Rica mejorar la calidad y eficiencia del gasto, movilizar fuentes alternativas de financiamiento, y avanzar hacia una reforma fiscal ecológica con tarifas para el carbono.
El informe indica que los impuestos a los combustibles en Costa Rica cubren el 46 % de las emisiones del sector, superior a la mayoría de los países latinoamericanos pero aún por debajo del promedio de la OCDE.
El ministro de Ambiente y Energía, Franz Tattenbach, dijo que la revisión de la OCDE es «dura» y que «contiene lo bueno, lo malo y lo feo» del país y afirmó que las recomendaciones que hace la organización «nos llevarán hacia el cumplimiento de nuestras metas».
El ministro resaltó que Costa Rica tiene «una base extraordinaria» para cumplir con las mejoras necesarias.
EFE