Mientras el Gobierno colombiano incumplía los acuerdos de paz con la guerrilla de las Farc, diferentes grupos armados se estuvieron posicionando hasta lograr un poder territorial que les permitiera alcanzar amplios corredores en los municipios del Norte, Nordeste y Bajo Cauca de Antioquia.
Tal es el caso de las Disidencias del Frente 36 de las Farc, bajo el mando de Édgar de Jesús Orrego Arango, alias ‘Firu’ o “Leo”, de 38 años, por quien se ofrece una recompensa de hasta cien millones de pesos ($100.000.000). Este frente hace parte -así como el Frente 18, también en Antioquia- del Estado Mayor Central -EMC- de Farc, que lidera Néstor Gregorio Vera Fernández, alias “Iván Mordisco”. El Frente 36 busca hacerse con el poder de las alcaldías en su zona de influencia.
La Corporación para la Paz y el Desarrollo Social – CORPADES y el Portal de Noticias Análisis Urbano, conocieron de primera mano lo que las Disidencias denominan el Pacto de Anorí y su estrategia para quedarse con el poder de las diferentes alcaldías de su zona de influencia.
Cada candidato a la alcaldía de Briceño, Campamento, Ituango, San Andrés de Cuerquia, Toledo, Valdivia, Yarumal y otros, deben asistir a extensas reuniones con mandos de las Disidencias del 36 en las que solicitan permisos para postularse a las diferentes alcaldías. Allí reciben no solo los permisos, sino que también, son aprobadas o no las postulaciones de dicho candidato con una serie de requisitos o acuerdos impuestos por el grupo armado.
En las últimas horas se ha conocido que el Grupo de Disidencias del Frente 36 ha puesto como regla a los candidatos que se postulen, un pago de cien millones de pesos ($100.000.000) para que puedan aspirar al primer cargo municipal.
Esta norma hará desistir a muchos candidatos por la falta de garantías a participar democráticamente en las elecciones a los próximos comicios para alcaldías.
La presencia de las facciones disidentes de los frentes 18 y 36 de las Farc en Antioquia datan del año 2019, principalmente se asientan en el Norte y Nordeste de Antioquia. Al principio fueron aliadas de la “Segunda Marquetalia” de “Iván Márquez”, pero luego de golpes dados por la fuerza pública y de ser diezmados casi en su totalidad, buscaron fortalecerse bajo el mando de las Disidencias de “Iván Mordisco”.
Las estrategias siguen siendo las mismas. Alcanzar el control territorial y social e impulsarse como estrategia político insurgente, retomar zonas que pertenecieron a las anteriores Farc-EP y limitar la movilidad de personas ajenas al territorio.
Las facciones disidentes de las Farc, quienes además han formado una alianza con las diferentes estructuras del ELN (como el Frente de Guerra Darío Ramírez Castro, de alias Nelson) y han logrado absorber al Frente 18, van avanzando y muestran un interés abierto para quedarse con el poder electoral de las alcaldías y los concejos Municipales.
Por el momento se conoce que los candidatos a la alcaldía de Briceño: Noe Espinosa «Pacho Umata», Álvaro Mora, Yeison Torres, Rubiel Antonio Agudelo, Leany Lopera y demás candidatos, no cuentan con las suficientes garantías para participar en las próximas elecciones y, quieran o no, deben asistir o ya fueron llevados por la fuerza hacia zona rural del municipio de Anorí.
Este no es un hecho menor, si se conoce que las Disidencias de Iván Mordisco buscan un espacio de dialogo con el Gobierno Nacional, mientras tanto continúan por debajo de la mesa de negociación apoderándose estratégicamente del territorio.
El denominado Pacto de Anorí muestra una peligrosa estrategia contra la democracia ejercida por el poder de las armas de las Disidencias y dejan un ambiente de mala voluntad en el sueño de alcanzar la paz.
Las subregiones de Norte y Nordeste están en alto riesgo y los recientes sucesos de disputa territorial son otro fenómeno que se confunde con el papel de una omisión de los diferentes estamentos del Estado representado en los alcaldes municipales, el Gobernador de Antioquia, la Fuerza Pública, los organismos de inteligencia y del Ministerio Público, que se niegan a frenar un desgobierno territorial.
A.U.
