Islamabad, 26 noviembre de 2024.-La organización Amnistía Internacional (AI) pidió este martes a las autoridades paquistaníes que deroguen de inmediato las órdenes de «disparar en el acto» y garanticen la protección de los derechos de los manifestantes.
La organización de derechos humanos expresó en un comunicado su profunda preocupación por el uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas del orden contra los partidarios del partido Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI) del ex primer ministro Imran Khan.
«Todo uso de la fuerza debe ser legal y no más de lo necesario y proporcionado, y las autoridades deben tomar todas las medidas necesarias para prevenir la privación arbitraria de la vida», indicó.
Las protestas comenzaron el domingo con una marcha de miles de seguidores del PTI desde diferentes partes del país hacia Islamabad, enfrentando a obstáculos importantes, incluidos bombardeos con gas lacrimógeno y bloqueos de carreteras, para responder al llamamiento hecho por el líder desde prisión.
El Gobierno de Pakistán ordenó hoy el despliegue del Ejército ante la llegada de manifestantes para una sentada a las puertas del Parlamento.
Según la radio estatal, también se han emitido órdenes claras de disparar a los malhechores y alborotadores.
La organización ha instado al Gobierno a ejercer la máxima moderación y evitar el uso de la fuerza, en particular munición real y balas de goma.
«Mientras los manifestantes entran en la capital, las fuerzas del orden han utilizado una fuerza excesiva e ilegal, como gas lacrimógeno, munición real y balas de goma, contra los manifestantes del PTI», denuncio AI.
«Incluso si las protestas no son pacíficas, las autoridades deben respetar y garantizar el derecho de los manifestantes a la vida y a no ser sometidos a torturas ni a otros malos tratos», instó.
Amnistía Internacional también ha condenado las supuestas detenciones arbitrarias de miles de manifestantes en todo Pakistán, en particular en Islamabad, denunciada por PTI si bien el gobierno no ha confirmado una cifra de arrestos.
Hasta el momento, las autoridades han informado de la muerte de cinco miembros de las fuerzas de seguridad y varios heridos.
EFE