Londres, 9 de febrero de 2022.- La Policía Metropolitana de Londres (Met, o Scotland Yard) no abrirá una investigación sobre un posible chantaje del Gobierno británico a los diputados conservadores críticos con el primer ministro, Boris Johnson, al no hallar pruebas de delito, informó hoy un portavoz policial.
La Met explicó que ha recibido información sobre la presunta «influencia indebida» ejercida sobre algunos parlamentarios que cuestionaron el liderazgo del jefe del Gobierno pero, después de estudiarla «detenidamente», no ha «detectado indicios de delito» y por tanto no seguirá indagando.
El portavoz señala que la Policía se replantearía la situación si surgiera «otra información significativa».
El pasado 20 de enero, el diputado conservador William Wragg, presidente de la Administración Pública y Asuntos Constitucionales de la Cámara de los Comunes, acusó al Ejecutivo de Johnson de «chantajear e intimidar» a los legisladores «tories» disidentes y pidió a estos que acudieran a la Policía para denunciarlo.
Wragg reveló que varios miembros del Parlamento habían «sufrido presiones e intimidación por parte del gobierno por su deseo declarado o supuesto de (pedir) un voto de confianza sobre el liderazgo del primer ministro».
«Las informaciones de las que dispongo parecen constituir chantaje. Mi recomendación es que los colegas informen al presidente de la Cámara de los Comunes y a la comisaria de la Policía Metropolitana», dijo entonces.
El Ejecutivo de Johnson negó que practicara el chantaje, aunque no desmintió que los jefes de disciplina usen tácticas agresivas para conseguir que los diputados se adhieran a la línea oficial, y en este caso, para que no maniobraran en contra del líder.
Boris Johnson sigue bajo presión por el escándalo de las fiestas celebradas en Downing Street durante la pandemia, que ahora investiga la Policía.
Una quincena de diputados de su grupo parlamentario ha pedido públicamente su dimisión, aunque se cree que más han solicitado formalmente en privado una moción de confianza interna en su contra, para cuya organización se requieren al menos 54 solicitudes o un 15 % de la bancada conservadora, una cifra a la que aún no se ha llegado.
EFE
