Los testimonios recopilados en el proceso indicarían que tras someter a niños y niñas a distintos vejámenes, alias el Lobo Feroz les daba dinero con la condición de que lo gastaran en dulces y video juegos.
Durante 12 días, las acciones investigativas y operativas se cumplieron en 16 departamentos y permitieron ubicar a jefes de bandas dedicadas al robo virtual, hackers y reclutadores de incautos que prestaban sus cuentas para recibir los dineros transferidos ilícitamente de diferentes entidades.
Sánchez Latorre quedó a disposición de funcionarios de Migración Colombia e Interpol Colombia, luego de la formalización del pedido de extradición que hizo la Fiscalía General de la Nación el 26 de enero del año en curso, ante la República Bolivariana de Venezuela.