Cuatro horas después, el conductor fue dejado en libertad con la advertencia de que le contara lo sucedido a su amigo y le mostrara los golpes que había recibido. El procesado no aceptó los cargos imputados por el delito de secuestro simple agravado.
Luego de varios minutos se bajaron en un callejón y mientras caminaban le repetían que lo iban a matar y a picar. Cuando los hombres escucharon las motos de la Policía tocaron la puerta de una casa y cuando les abrieron le dijeron al hombre que los dejara entrar que no se demoraban, el señor muy asustado aceptó. En una de las habitaciones continuaron los maltratos físicos y las amenazas de muerte.
Según manifestó la víctima en la denuncia, durante el recorrido los hombres lo golpearon e insultaron y Francisco Javier le habría puesto un arma de fuego en el abdomen y lo obligó a que entregara los celulares y las claves de sus tarjetas bancarias. Los ilegales entraron a varios cajeros electrónicos y hurtaron de sus cuentas $1.800.000.
El Juzgado 15 Penal Municipal de Medellín, Antioquia, con funciones de control de garantías, impuso medida de aseguramiento en centro carcelario en contra de...