Antioquia, Colombia, 5 noviembre de 2022.- Este viernes 4 de noviembre se presentó un feminicidio en la zona rural del municipio de Andes, Suroeste Antioqueño, la víctima fue una joven de 18 años de edad.
Este hecho de sangre atroz ha dejado consternado al municipio, obviamente al departamento de Antioquia. Paula Andrea Restrepo era estudiante de bachillerato.
Fuentes consultadas por la Agencia de Prensa Análisis Urbano, afirman sin dudarlo que unos extranjeros que están trabajando para una banda que está conectada con una de las líneas militares de la Oficina del Valle de Aburrá u Oficina de Envigado, serían los artífices del brutal asesinato.
Paula Andrea fue hallada tirada a la orilla de una cañada
La joven fue hallada a orilla de una cañada, ultrajada violada, con varias heridas producidas por arma cortopunzante y fuertemente violentada en su condición de mujer.
La víctima días antes venía anunciándole a los allegados y al parecer a los familiares que estaba acosada por unos sujetos de nacionalidad extranjera.
Paula Andrea Restrepo Parra, había salido de clases ayer 4 de noviembre de la Institución Educativa Rural Santa Rita, desde esa fecha se encontraba desaparecida.
Lamentablemente fue hallada en horas de la noche muy mal herida, fue trasladada a un centro hospitalario del municipio, allí falleció por la gravedad de las heridas.
EN ANDES MUCHAS MUJERES ESTÁN SIENDO ACOSADAS
En el municipio las mujeres vienen siendo víctimas de acosos y agresiones sexuales permanentemente. Muchas deciden no realizar denuncias por la revictimización que reciben de las autoridades municipales. Lo que pareciera ser un secreto a voces es ya la corrupción de las autoridades.
La criminalidad urbana y rural apadrinada por una de las líneas militares de la Oficina, sigue manteniendo un poder hegemónico en Andes, ellos someten a la población, amenazan, desplazan forzadamente, extorsionan, reclutan y asesinan a miembros de la comunidad indefensos.
El peor escenario es que las autoridades locales se hacen los de los oídos sordos ante un clamor generalizado de buena parte de la población. El control es total y parece que han sometido a las instituciones locales.
Cabe recordar que los ilegales usan todos los corredores estratégicos de esta zona y se han instalado de manera premeditada para vigilar sus rentas ilícitas.
LA INSTITUCIONALIDAD NO ESCUCHA A QUIENES DENUNCIAN LO QUE OCURRE
Varios habitantes han buscado un canal directo con los altos mandos de la Policía Antioquia, el objetivo de la reunión es poder mostrar lo que está ocurriendo para poder encaminar investigaciones de fondo que vean las irregularidades que se vienen presentando con varios miembros de la Policía acantonada en Andes, sin embargo, ellos, los que manda en la DEANT, al parecer no han accedido a abrir un espacio de confianza que podría destapar una olla podrida de la que todos hablan y funcionarios públicos quieren callar.
Con el feminicidio de la joven Paula Andrea en Andes, se puede demostrar sin miedo a equivocarse que este grupo armado ilegal que actúa en la zona se caracteriza por hechos violentos cargados de crueldad, por ejemplo, la existencia de casas de tortura y pique, lugares donde utilizan armas cortopunzantes, armas contundentes, entre otros, para luego terminar desapareciendo a sus víctimas.
También los sicarios de este grupo son reconocidos por su excesiva crueldad con las víctimas, el caso de la joven asesinada así lo demuestra.
De nada ha servido la Alerta Temprana 044-20 de la Defensoría del Pueblo, el peligro latente para mujeres y población vulnerable es alta, las alarmas están encendidas, solo falta una institucionalidad que de verdad quiera recuperar esta zona para los Andinos.
A.U.