Al ingresar a la bodega, las dimensiones de lo que pretendía hacer esta banda apenas se descubrían. “Se encontraron 22.700 botellas vacías de ron whisky, tequila y aguardiente que estaban listas para ser reenvasadas con licor adulterado y hallamos dos mil botellas listas para ser distribuidas en el mercado ilegal”, explica el general Buitrago.