Pérez señaló que lo único que se puede probar en este tema es que solo existe un contrato para acelerar las obras en Pescadero Ituango y que fue firmado por la gobernación de Sergio Fajardo en diciembre de 2015.
Esta contingencia ya había sido prevista y anunciada hace diez años por geólogos y ambientalistas de la Universidad Nacional, sede Medellín, quienes manifestaban que los estudios geológicos de la cuenca del río Cauca habían dejado en cuestión la estabilidad de los suelos en la cordillera y esto había sido desconocido.
A la Procuraduría le llama la atención que los estudios de prefactibilidad del proyecto Hidroituango no hubieran advertido de la condición geológica donde se desarrolla la obra y que podría derivar en un desprendimiento de roca y tierra, como efectivamente ocurre desde el pasado 28 de abril.