Finalmente, el Nodo y Proceso exigen una fuerza pública “comprometida con la construcción de la paz, comprometidos con los derechos humanos, con la democracia y que se excluyan completamente todos los nombramientos de los mandos militares que han estado vinculados a graves crímenes de guerra contra la población”.
La investigación está relacionada con la masacre de 43 personas en el corregimiento Pueblo Bello del municipio de Turbo, Urabá antioqueño, perpetrada por integrantes de la denominada Casa Castaño.