Montoya Orjuela era víctima de amenazas, por lo que se tuvo que refugiar en Cartago, donde fue localizado por sicarios que sin mediar palabra y sin compasión dispararon contra él cuando se desplazaba en un vehículo con Paola, causándoles la muerte a los dos.
De acuerdo con la investigación los presuntos delincuentes rompieron los vidrios o dañaron las chapas de las puertas de los automotores y sustraían computadores, celulares, joyas y otros objetos de valor, por una cuantía superior a los 138 millones de pesos.
Luego de más de dos años de investigaciones que incluyeron interceptaciones, seguimientos y verificaciones, la Fiscalía General de la Nación asestó el más duro...