Antioquia, Colombia, 11 octubre de 2022.- Lo que viene sucediendo en el municipio de El Bagre, es de no creer, violencia extrema y criminalidad azotan al municipio, mientras eso ocurre, las autoridades parecen en estado de inercia a pesar de que están realizando algunas capturas, decomisos y que supuestamente han fortalecido la presencia institucional; lo claro es que la partida la están ganado los grupos armados ilegales.
Cabe recordar que desde hace muchos meses se ha venido denunciando públicamente los graves riesgos que están corriendo los líderes sociales y la comunidad en general.
Cuando planteamos que parece inverosímil que esto se esté presentando en El Bagre, lo hacemos con argumentos y pruebas fehacientes, por ejemplo, los hechos más recientes que abarcan dos meses:
INMINENTE RIESGO PARA LA COMUNIDAD DE PUERTO LÓPEZ
El pasado 7 de octubre se registró una ocupación armada de no menos de 200 integrantes de la estructura paramafiosa de las AGC, allí, la comunidad vivió momentos de zozobra y terror porque se esperaba lo peor, no era para menos, “Los decapitadores y destripadores habían regresado”, fue la afirmación de muchos ciudadanos y ciudadanas, es de anotar que igual pasa cuando aparecen Los de Abajo (Los Caparros), la comunidad la embarga el miedo, conocen perfectamente las orgias de sangre a las que someten a sus víctimas.
ENFRENTAMIENTOS ARMADOS ENTRE GRUPOS ILEGALES ESTÁN GENERANDO EL CONFINAMIENTO
Enfrentamientos entre estructuras armadas ilegales que tienen confinada desde hace más de cuatro días a la población de Puerto López, que hace parte del municipio de El Bagre.
El corregimiento de Puerto López es un territorio totalmente abandonado por el Estado. No hay presencia real de la institucionalidad, eso lo saben los ilegales y aprovechan la ausencia estatal para hacer de las suyas e imponerse sobre la población, las decapitaciones y destripadas de personas para luego lanzarlas al río son, ejemplo palpable y significa que esas muertes son responsabilidad directa de la fuerza pública.
Según relata la Defensoría del Pueblo, en los últimos días estas comunidades del municipio de El Bagre que están en inminente riesgo, se han visto inmersas en eventos de violencia como enfrentamientos con interposición de la población civil, además se siguen presentando reclutamientos forzados, hay un alto riesgo de desplazamientos masivos.
La ONG Corpades y la Agencia de Prensa Análisis Urbano siguen recalcando que miles de personas de las comunidades están confinadas y que el “fantasma” de las torturas, desmembramientos, destripamientos y desapariciones forzadas recorre el territorio ante la mirada indolente de quienes deberían proteger a la gente, la institucionalidad.
La Estructural 045-20 del Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría del Pueblo ya habría advertido sobre la consolidación y presencia de grupos armados en esta zona, sin embargo, el riesgo no fue contenido ni superado.
En Puerto López, las veredas Luis Cano, El Real, Aguacates, Matanza, Borrachero, Las Dantas, Santa Isabel, La Lucha, La Corona, Las Claritas, El Perico, La Bonga, Alto Berrugoso, Villa Grande, El Pedral, Chaparrosa, Villa Hermosa, Negras Intermedias, Las Negritas, San Cayetano, El Socorro, Arenas Blancas y Los Almendros mantienen un alto riesgo por la continua presencia de actores armados que generan intranquilidad entre los habitantes.
En Puerto Claver la situación no es diferente, las veredas Bamba, Mellizos, Chiritá, La Rica, Santa Teresa, Santa Margarita, Amacerí, Danta Rosa, El Castillo, Arenales, Las Claras, El Oso, La Llana, Muquí, Primavera, Río Viejo, la Arenosa, El Coral, Santa Barbarita, La Aduana, Río Viejo, Sabalito Sinaí, Boca del Guamo, San Pedro, Guachí.
CRECE EL INTERÉS DE LOS GRUPOS ARMADOS ILEGALES POR QUEDARSE CON PUERTO LÓPEZ
En las últimas semanas ha venido creciendo el interés de las estructuras de poder ilegal armado por el control de Puerto López. Se evidencia en la fuerte disputa que han desatado las AGC, Los Caparros o los de Abajo, el ELN, las Disidencias de Farc, incluso podría haber otras estructuras armadas en la zona.
El mapa muestra los posibles escenarios de confrontación militar por avance y fortalecimiento armado de los actores, esto ha significado para esta zona las recientes confrontaciones en los últimos días en zonas que se habían anunciado como de un permanente peligro para la población.
Es de anotar que en el Bajo Cauca desde hace varios años el orden público se ha venido deteriorando rápidamente, eso deja entrever que hay una falta de voluntad política de la institucionalidad local, departamental y nacional, principalmente de la fuerza pública.
Ante la ausencia de liderazgo institucional, la Gobernación de Antioquia en cabeza de Aníbal Gaviria está obligada a redireccionar la hoja de ruta de seguridad y paz en la subregión, es urgente que las autoridades prevengan y protejan con medidas eficaces, rápidas y no cortoplacistas a estas poblaciones.
ES URGENTE ACTUAR
La Defensoría del Pueblo ha pronosticado que de seguirse con los escenarios de riesgo se presentarán reclutamientos forzados, uso y utilización de niños, niñas y adolescentes, siembra de minas antipersonales, aumentarán las desaparición forzada, desplazamientos forzados, confinamientos forzados, despojos, extorsiones, homicidios selectivos, masacres, violencias basadas en género, violencia sexual, amenazas y constreñimiento, regulaciones a la movilidad, más enfrentamientos con interposición de la población civil y ataques indiscriminados.
Queda esperar que la dirección del nuevo Gobierno nacional en cabeza del presidente Gustavo Petro lleve a estas comunidades a superar la grave crisis de seguridad.
Es necesario entonces atacar los riesgos de raíz y a partir de esto brindarles garantías reales a estas poblaciones que en la actualidad siguen padeciendo el embate de la guerra.
Es claro que la Paz Total es el camino adecuado, sin embargo, es importante tener en cuenta que hay grupos ilegales armados que no están mostrando intenciones de montarse en el tren de la paz que viene proponiendo el presidente de los colombianos y colombianas.
A.U.
APUNTE URBANO-RURAL
Recientes hechos de violencia armada contra la población ponen nuevamente el foco de atención en el orden público en los municipios Cáceres, Caucasia, El Bagre, Nechí, Tarazá y Zaragoza, ubicados en la subregión del Bajo Cauca antioqueño.
En esta subregión la disputa territorial entre las Autodefensas Gaitanistas de Colombia –AGC- o Clan del Golfo contra el frente “Virgilio Peralta Arenas”, también conocido como “Los Caparros” o “Caparrapos” o Los de Abajo, produjo una crisis humanitaria que se ha mantenido latente desde entonces.
Lea el informe completo, » Consumación del riesgo en el Bajo Cauca antioqueño«
MAPA DE ACTORES ARMADOS EN ANTIOQUIA