Esto ya es común en esas zonas, sin embargo, guardábamos las esperanzas de que el 30 de noviembre y amanecer del 1 de diciembre la institucionalidad mostrara su efectividad en la llamada «alborada mafiosa» y, en particular, en la «alborada criminal» que la alianza de Pájaros Rebeldes y Chivos harían. Todos sabían que pasaría, solo el Plan de Intervención desconoció lo inevitable. Y así sucedió.
Esperamos que este año ellos hagan la diferencia y empiecen a cambiar el estado de cosas impuesto por el régimen criminal, ese que los vacuna, constriñe, envenena con droga a sus hijos, los esclaviza con el pagadiario, explota sexualmente a sus niñas, niños y adolescentes, ese que recluta forzadamente a sus hijos y que le impone un modo de vida que los lleva a vivir la esclavitud moderna.